Oaxaca, Oax., 11 de septiembre del 2016. (El Financiero.com)- Sin enfrentamientos ni actos de resistencia, durante la noche de este sábado y madrugada del domingo, comerciantes ambulantes salieron del Zócalo y Alameda de León, espacios que por casi cuatro meses mantuvieron invadidos de puestos.
Los ambulantes, en su mayoría afiliados a la Unión de Artesanos y Comerciantes Oaxaqueños en Lucha (Uacol) y a la organización 14 de junio, cobijados por la Sección 22 del SNTE, se posesionaron desde mayo pasado, del espacio público donde mantenían al menos 300 puestos.
Ante el anuncio de un posible desalojo, los vendedores comenzaron a quitar los puestos y su mercancía, cables de luz e incluso tanques de gas, en el caso de los puestos de comida para evitar que les fueran decomisados.
Las corporaciones policiacas arribaron al lugar poco después de la una de la madrugada y tras ingresar retiraron lonas y plásticos que aún se encontraban en la explanada de la Alameda y el Zócalo.
Posteriormente cuadrillas de trabajadores de limpia comenzaron con las labores de barrido y lavado.
En un primer reporte se informó que fueron retiradas más de 80 toneladas de basura.
El Comisionado de seguridad pública, vialidad y protección civil del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, Edwin Vázquez Nazario, reportó saldo blanco en el operativo para la salida de vendedores ambulantes.
Indicó que sin que se registraran hechos de violencia o la resistencia de los comerciantes, unos 250 puestos fueron retirados del lugar para posteriormente efectuar un dispositivo de limpieza.
Mencionó que el operativo se implementó únicamente con la finalidad de recuperar el espacio público ocupado por los ambulantes y pueda ser disfrutado por oaxaqueños y visitantes.
Vásquez Nazario explicó que por parte de la Comisión de Seguridad Pública intervinieron 110 elementos y 200 de la Policía Estatal.
«Ya se pudo dispersar el comercio ambulante, fue un tema que no se tomó al vapor, sino se tomaron las medidas necesarias para evitar incidentes», dijo.
Por otra parte, confirmó que se respetará el espacio del campamento de la Sección 22 a un costado del kiosko del Zócalo.
El comisionado de Seguridad Pública señaló que las nueve bocacalles serán resguardadas por elementos de la corporación a partir de este domingo para la seguridad de las fiestas patrias.
MAESTROS QUEMAN RESTOS DE PUESTOS
En rechazo a salida de los vendedores ambulantes, maestros de la Sección 22 del SNTE prendieron fuego a los restos de puestos que quedaron abandonados en el lugar.
Varias estructuras de madera que se encontraban en los alrededores del corazón del Centro Histórico quedaron reducidas a cenizas.
Huacales y lonas de plástico también fueron quemadas. La situación no pasó a mayores.
Con información de El Financiero.com