01 de junio, 2016 — El Secretario General de la ONU lamentó profundamente la reciente muerte de cientos de personas en el Mediterráneo e instó a los gobiernos y organizaciones de la zona a redoblar los esfuerzos para salvar a los migrantes y refugiados que se encuentren en riesgo.
En un comunicado, Ban Ki-moon recordó que este año se ha convertido en uno especialmente letal, con 2.510 vidas perdidas en apenas cinco meses. En 2015, la cifra ascendió a 1.855 durante el mismo periodo.
Ban encomió las operaciones de búsqueda y rescate lideradas por Italia y llamó a los países europeos a sumarse a la asistencia de quienes se encuentren en riesgo en el mar, así como de las personas que corran el peligro de caer en las redes de traficantes de personas que rondan en los mares Egeo y Mediterráneo.
Asimismo, el titular de la ONU reiteró la urgencia de una respuesta colectiva y amplia a los grandes movimientos de refugiados y migrantes, que incluya más vías legales de migración.
Recordó también que la reunión de alto nivel que se celebrará el 19 de septiembre en la sede de la ONU en Nueva York será una oportunidad única de acordar un marco de trabajo y mostrar una mayor solidaridad, además de una responsabilidad compartida con los países que acogen a la mayor parte de los refugiados.