La muerte de un expresidente del país siempre es motivo de noticia. Miguel de la Madrid Hurtado no puede la excepción, pero ¿fue un mandatario que pasara sin pena ni gloria? Si ponemos en la balanza su estilo de gobierno, lo que inició, tendríamos que definirnos por la primera acepción, pues las penas fueron muchas y con de la Madrid cambia radicalmente el rumbo de la economía, una economía que ha fabricado millones de pobres y favorecido a un muy reducido número de mexicanos.
Es con Miguel del la Madrid cuando el liberalismo entra a sus anchas, cuando llega a instalarse a fin de intentar lo que los economistas llaman el libre mercado, que no es más que una variante del capitalismo salvaje predicho por sociólogos y economistas de la primera mitad del siglo pasado. Con este presidente se desmantela el Estado de Bienestar, se emprenden reformas que desrregulan la relación entre el Estado y los empresarios, se ponen en circulación prácticas regulatorias que provocan por primera vez en la historia de este país números inflacionarios tan altos que se tiene que redefinir el precio de la moneda.
Una de las consecuencias de estas políticas es la ausencia del Estado en la aplicación de políticas sociales que protejan a quienes no cuentan con empleo, ni capacidad de compra, ni prestaciones. Si se observa bien Miguel de la Madrid es el precursor de lo que se ha aplicado en la economía con Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón Hinojosa. Hay un hilo conductor que los identifica ya sean presidentes salidos del PRI o del PAN: la deshumanización de la economía.
Antes de Miguel de la Madrid, si bien había ricos y pobres, el poder adquisitivo de los mexicanos era mucho mayor. Los números reportados por el IMSS si hacemos un comparativo histórico, nos indican que había más empleo. El Estado benefactor intervenía en no pocas áreas de la economía lo cual aportaba su grano de arena a un estado de cosas que hoy parecieran estar lejos, muy, muy lejos.
En momentos en que la economía de mercado, el neoliberalismo, ha provocado millones de pobres, aún aquellos que no pueden satisfacer sus demandas alimentarias, es necesario no perder de vista este dato, este estilo de gobierno que inició Miguel de la Madrid y que ha sido un parte aguas negativo para la vida de millones de mexicanos. Como sea descanse en paz.
La muerte de un expresidente del país siempre es motivo de noticia. Miguel de la Madrid Hurtado no puede la excepción, pero ¿fue un mandatario que pasara sin pena ni gloria? Si ponemos en la balanza su estilo de gobierno, lo que inició, tendríamos que definirnos por la primera acepción, pues las penas fueron muchas y con de la Madrid cambia radicalmente el rumbo de la economía, una economía que ha fabricado millones de pobres y favorecido a un muy reducido número de mexicanos.
Es con Miguel del la Madrid cuando el liberalismo entra a sus anchas, cuando llega a instalarse a fin de intentar lo que los economistas llaman el libre mercado, que no es más que una variante del capitalismo salvaje predicho por sociólogos y economistas de la primera mitad del siglo pasado. Con este presidente se desmantela el Estado de Bienestar, se emprenden reformas que desrregulan la relación entre el Estado y los empresarios, se ponen en circulación prácticas regulatorias que provocan por primera vez en la historia de este país números inflacionarios tan altos que se tiene que redefinir el precio de la moneda.
Una de las consecuencias de estas políticas es la ausencia del Estado en la aplicación de políticas sociales que protejan a quienes no cuentan con empleo, ni capacidad de compra, ni prestaciones. Si se observa bien Miguel de la Madrid es el precursor de lo que se ha aplicado en la economía con Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón Hinojosa. Hay un hilo conductor que los identifica ya sean presidentes salidos del PRI o del PAN: la deshumanización de la economía.
Antes de Miguel de la Madrid, si bien había ricos y pobres, el poder adquisitivo de los mexicanos era mucho mayor. Los números reportados por el IMSS si hacemos un comparativo histórico, nos indican que había más empleo. El Estado benefactor intervenía en no pocas áreas de la economía lo cual aportaba su grano de arena a un estado de cosas que hoy parecieran estar lejos, muy, muy lejos.
En momentos en que la economía de mercado, el neoliberalismo, ha provocado millones de pobres, aún aquellos que no pueden satisfacer sus demandas alimentarias, es necesario no perder de vista este dato, este estilo de gobierno que inició Miguel de la Madrid y que ha sido un parte aguas negativo para la vida de millones de mexicanos. Como sea descanse en paz.
Seguramente estábamos mejor con las devaluaciones, la deuda externa galopante y las reservas internacionales en ceros con José López Portillo.