Columna Política «SENDER POLITICO, Por José Cruz Delgado.- Cada vez que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) tiene eventos de gran importancia como elecciones o renovación de dirigencias nacional o estatal, se ufana de que hay unidad, pregonan a los cuatro vientos que hay cohesión y que el PRI estás más fuerte y más unido que nunca, pero en la práctica es una falacia. La prueba está en la pasada contienda electoral, el Revolucionario Institucional aparentó que había unidad y que el triunfo con Chon Orihuela era irrefutable. El golpeteo político se estaba dando debajo de la mesa entre los grupos políticos, se estaban, o más bien, le estaban dando hasta con la cubeta al ex abanderado priísta.
Los grupos políticos o expresiones como les llama el PRD, son pandillas de políticos que buscan el poder como sea, no les importa la unidad sino los intereses personales o de su grupo y para lograrlo pisotean a todo el que se le pare enfrente.
En el PRI, como en el PRD, existen esas pandillas, como los TINOQUISTAS, LOS FAUTISTAS, LOS AUSENCISTAS, LOS REYNISTAS, LOS CHONISTAS, etc. Se acerca la renovación de la dirigencia nacional cuya cabeza es MANLIO FABIO BELTRONES, personaje afín al Presidente ENRIQUE PEÑA NIETO. Beltrones asumirá la presidencia del PRI nacional y, por ende se viene también la renovación de los Comités estatal, como es el caso de Michoacán, donde ya empezó el jaloneo. Las pandillas tricolores buscarán a sus mejores gallos para que ocupen la dirigencia.
Las mafias del poder, como dijera Andrés Manuel López Obrador, también existen en el PRI, aquel político que se cobija en una pandilla tiene futuro, quien se quiere ir por la libre es de inmediato aplastado y marginado, mejor dicho acaban con su carrera política. ¿Dónde está la unidad?
La unidad sólo se ve cuando viene la cargada. Seguramente Beltrones vendrá a Michoacán y los líderes de las pandillas políticas le harán que hay unidad, pero se estarán mentando la “madre” con la mirada y se apuñalarán por la espalda cuando se den el abrazo de una supuesta amistad y unidad para hacerle creer al próximo líder nacional que no pasa nada y que no hay rencores y que todos merecen ser tomados en cuenta para la renovación de la dirigencia estatal. Si hubiera habido unidad Chon habría ganado la elección, pero no, hubo jaloneos y traiciones. ¿Unidad?
También hay priístas muy institucionales como es el caso de Víctor Silva Tejeda, se dice que tiene su grupo o al menos a muchos militantes y simpatizantes afines a él les llaman SILVISTAS. Veremos si de verdad existe y le dan el respaldo para que ocupe la presidente del PRI en Michoacán, pero hay que recordar que es afín a Manlio Fabio Beltrones o al menos es muy institucional que es un mérito que muchos no tienen sea el bueno. Veremos en que para esto de LA UNIDAD? Beltrones debe tener mucho cuidado en Michoacán y elegir a un priísta, sí, institucional y que le ayude más adelante a recuperar este estado que se perdión por una unidad simulada.
Las tribus, las expresiones, pandillas, mafias, como les quieran llamar existen en todos los partidos políticos, el PRI no es la excepción.
Amnesia de Acosta Naranjo
Los jaloneos por la presidencia del PRD y la coordinación en la Cámara de Diputados hacen que se pierda la memoria, pues Guadalupe Acosta Naranjo, quien metió en la cajuela de su auto a Julio César Godoy, prófugo por una averiguación por narcotráfico, pretende ser el coordinador de los diputados perredistas. ¿Será éste el rostro con el que se quieren identificar sus nuevos diputados? Quedamos en que se vale preguntar.
AMLO está de plácemes
Si alguien está de plácemes, luego de que la mayoría de integrantes del Consejo General del Instituto Nacional Electoral, llevada de la mano por el “bloque priista”, resolvió no cancelarle el registro al Verde Ecologista, es Andrés Manuel López Obrador que con ello asegura que podrá seguir violando la Constitución y la legislación en la materia, como se ha cansado de hacerlo, sin riesgo alguno para el partido de su propiedad, Morena, que al igual que a otros, les abrieron las puertas para hacerlo en procesos venideros.
A pesar de que algunos consejeros electorales como Pamela San Martín y José Roberto Ruiz Saldaña, coincidieron en señalar que sí procedía la máxima sanción y de que dos más, Arturo Sánchez Gutiérrez y Javier Santiago Castillo, rechazaron el proyecto porque no se propuso castigar la sistematicidad de violaciones legales en que incurrió que lo ameritaban, su colega Marco Antonio Baños, al que se reconoce más identificado con el PRI, encabezó a los que se negaron a aplicarla.