15 de junio, 2015 — Los presidentes de México y de Colombia llamaron a establecer redes de protección social, a impulsar el desarrollo rural y a asegurar la paz para erradicar el hambre en América Latina.
Durante su participación en la sesión de clausura de la Conferencia de la FAO, en Roma, Enrique Peña Nieto y Juan Manuel Santos coincidieron en la importancia de apoyar la agricultura familiar e incluir a todos los sectores de la población en la agenda de desarrollo con el fin de eliminar la pobreza extrema y garantizar la seguridad alimentaria para todos.
“Estoy convencido de que es posible reducir la pobreza extrema y la desnutrición de manera acelerada, sustancial y sostenible”, afirmó Peña Nieto de México, citando los avances de la «Cruzada Nacional contra el Hambre», que beneficia a 4,3 millones de mexicanos.
La iniciativa incluye comidas para más de 430.000 niños, mujeres embarazadas y lactantes, personas mayores y personas con necesidades especiales a través de una red de 4.000 cocinas comunitarias.
El mandatario advirtió, no obstante, que proporcionar a la gente comida nutritiva no es suficiente, sino que se le debe dar la oportunidad de construir una mejor vida.
Por su parte, el presidente colombiano sostuvo que la paz debe empezar en el campo, y destacó el enorme potencial de su país en la producción de alimentos, y el papel central que juegan los agricultores familiares para lograrlo.
“Para el campo colombiano y para la seguridad alimentaria mundial, la terminación del conflicto armado en Colombia es una oportunidad”, dijo.
Santos explicó que Colombia está desarrollando una estrategia para hacer más competitivo el campo con líneas de crédito específicas para las cadenas productivas e impulso a la asistencia técnica y la investigación.