10 de junio, 2015 — El Secretario General de Naciones Unidas alertó hoy sobre los grandes desafíos que enfrenta el mundo en materia de acceso a agua potable y lamentó que 2.500 millones de personas no tengan servicios de saneamiento adecuados.
Durante su participación en Dushanbé, Tayikistán, en una conferencia de alto nivel por el Decenio Internacional para la Acción «El Agua, Fuente de Vida», Ban Ki-moon destacó algunos avances de las últimas décadas, como el que un tercio de la humanidad haya logrado abasto de agua potable a través de sistemas modernos y que en los últimos 10 años casi 2.000 millones de personas accedieron a servicios de saneamiento aceptables.
Sin embargo, alertó sobre la permanencia de retos:
“Aún hoy, en el siglo XXI, unas 1.000 millones de personas defecan al aire libre. Aún hoy en el siglo XXI, cerca de mil niños menores de 5 años mueren cada día por una mezcla tóxica de agua contaminada, mala salubridad e higiene”, dijo.
El titular de la ONU aseguró que el costo económico de los sistemas de suministro de agua y salubridad es de 260.000 millones de dólares anuales.
Explicó que dentro de una década, 1.800 millones de personas vivirán en zonas con absoluta escasez de agua y dos tercios de la población mundial podrían enfrentar condiciones limitadas de abasto. Por ello hizo un llamado al compromiso de la comunidad internacional para el mejor cuidado del vital líquido.