16 de abril, 2015 — El Programa Mundial de Alimentos (PMA) y sus socios en el terreno se encuentran distribuyendo comida para 105.000 desplazados en la ciudad de Adén en Yemen, no obstante, advirtió que es un enorme desafío alimentar a millones de personas en medio del deterioro de la seguridad.
En un comunicado, esa agencia de la ONU apeló a todas las partes en conflicto a permitir la reposición de las reservas de alimentos y de combustible para continuar con los operativos y salvar vidas.
El PMA subrayó que las dos últimas semanas de escalada de la violencia han dejado a muchos yemeníes con hambre, atrapados en sus ciudades con reducidos suministros de comida.
Además, existe una gran escasez de combustible, especialmente en Adén y zonas de la capital, Sana’a.
Según encuestas llevadas a cabo por la agencia en 2014, en Yemen hay 10,6 millones de personas en situación de inseguridad alimentaria, el equivalente al 41% de la población. Entre ellos, 5 millones requieren asistencia alimentaria urgente.