14 de abril, 2015 — El número de civiles víctimas de los enfrentamientos violentos en Afganistán aumentó durante los primeros tres meses de 2015, en relación al mismo periodo del año anterior, alcanzando un total de 521, de las cuales murieron 136.
Los datos divulgados por la Misión de Asistencia de la ONU en ese país indican, por otra parte que las víctimas de atentados se mantuvieron en el mismo nivel que en 2014, y reportó que el total de muertos y heridos por hostilidades o terrorismo sumó 655 muertos y 1.155 heridos.
UNAMA también advirtió que la cifra podría aumentar en los próximos meses dada la crudeza de los choques entre las fuerzas que apoyan al gobierno y las que se oponen a él.
Al dar a conocer el informe, el jefe la UNAMA llamó a todas las partes enfrentadas, y especialmente al Talibán, a cesar los ataques contra la población que no tiene que ver con las hostilidades.
“Todos los actores deben contenerse y no usar morteros ni cohetes en las áreas pobladas por civiles”, subrayó Nicholas Haysom.
El titular de UNAMA indicó que existen señales preocupantes de que el conflicto escalará en los meses por venir, con consecuencias devastadoras para la gente inocente, por lo que urgió a las partes a cumplir con las leyes humanitarias y de derechos humanos internacionales.
Según los datos de la Misión, los niños y mujeres víctimas alcanzaron niveles sin precedentes en el primer trimestre, con 55 mujeres y 123 menores muertos.