Morelia, Mich. 10 de noviembre de 2013.- La búsqueda de “una arquitectura de convivencia, que permita vivir junto a la comunidad no con la humanidad”, es el factor en el que radica la innovación técnica y estética de Oscar Hagerman, por lo que la Facultad de Arquitectura de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) reconoció sus aportaciones a través de una exposición retrospectiva sobre su obra, como parte de las actividades de conmemoración por los 35 años de su fundación, y que se mantiene en el Centro de Información, Arte Cultura (CIAC), en Ciudad Universitaria,
En la ceremonia de apertura a la que asistió el propio autor, el director de la Facultad de Arquitectura, Joaquín López Tinajero, dijo que se reconoce en Hagerman que “la arquitectura no es una forma, sino un servicio”, pues es notorio su acercamiento al sector indígena a través de su obra y con ello un intento por borrar el olvido sistemático que la historia profesa a ese sector.
“Para Hagerman, la arquitectura debe ser un canto a la vida, el canto de los que habitan, porque lo más hermosos es que el proyecto salga de la gente. Las arquitecturas sensibles a la gente y al paisaje permiten unir la tierra con el cielo; permiten tratar a la gente humilde con gran dignidad a través de su contenido social que permite ayudar a crear pequeños mundos que armonicen con las personas”.
Por su parte, Oscar Hagerman dijo también ante el director de Planeación en UMSNH, Salvador García Espinoza, que su esfuerzo se dirige a la creación de una arquitectura compatible con el entorno y la cultura regional, “y me da gusto ver cómo las nuevas generaciones tienen interés en hacer una nueva arquitectura más próxima con los materiales naturales, respetuosa del medio ambiente, cuidando los recurso del planeta; una arquitectura más próxima a las personas, de convivencia, para vivir junto a la comunidad no con la humanidad”.
Luego, Hagerman convocó a que la arquitectura futura “sea de esperanza, pensando en el presente, en el pasado y en el futuro, cuidando los recursos de este planeta, pensando en las nuevas generaciones, es una arquitectura para que todos vivamos mejor. Suena presuntuoso pero si lo vemos con una actitud frente a la vida, creo que sí cambiaría a la sociedad y cambiaría nuestro universo”.
Agregó que la exposición retrospectiva que le ofreció la UMSNH “es un recorrido por mi vida profesional lleno de recuerdos. He trabajado como a mí me gusta y tengo recuerdos tan bonitos y tantas alegrías con la gente de los pueblos, tanto construir sueños juntos, levantar una escuela que es la esperanza para jóvenes de la comunidad, una esperanza para trasformar sus vidas”, y mencionó anécdotas personales como su trabajo junto a los huicholes y la construcción de una clínica en la comunidad de Acteal, entre otras, antes de hacer el corte de listón inaugural.
La exposición se mantendrá en el CIAC, aledaño al edificio de Rectoría, en Ciudad Universitaria de Morelia, con acceso gratuito para los interesados.