Ciudad de México, a 01 de octubre de 2013.- Al presentar la iniciativa para el Sistema Nacional de Programas Sociales, a fin de contar con una herramienta que permita tener mayores niveles de coordinación, eficacia, transparencia e integralidad en las acciones del Estado Mexicano para promover el Desarrollo Social, el Senador de la República, Raúl Morón Orozco, destacó que el objetivo de la propuesta es generar instrumentos que impidan e inhiban las viejas prácticas de lucrar con el hambre y la miseria de la gente, de condicionar beneficios sociales a cambio de apoyo político.
En la sesión ordinaria de este día, el legislador federal por Michoacán destacó que la cuestión de los programas sociales fue una de las promesas del llamado Pacto por México, como es el caso de la llamada Cruzada contra el Hambre, pero que en muchos casos se trata de un tema que resurge siempre al calor de los procesos electorales. “Se aborda en el marco de la disputa por el poder, por razones de equidad electoral, no de justicia social. Una vez que pasan las contiendas, el asunto se olvida, o simplemente deja de ser considerado como prioritario”.
Por ello, destacó que para el PRD, la regulación y transparencia del uso de los programas sociales es un tema de la más alta prioridad, porque en México se tienen grandes desafíos en materia de desigualdad, de exclusión social, de pobreza y de marginación: de derechos sociales incumplidos.
“La iniciativa que someto a su consideración, tiene por objeto crear el Sistema Nacional de Programas Sociales; un instrumento que nos permita tener mayores niveles de coordinación, eficacia, transparencia e integralidad en las acciones del Estado Mexicano para promover el Desarrollo Social. México debe ser más efectivo en el combate frontal de la pobreza, en la disminución de las desigualdades sociales y económicas”, recalcó Morón Orozco.
La iniciativa, suscrita por varios senadores, busca generar instrumentos que impidan e inhiban las viejas prácticas de lucrar con el hambre y la miseria de la gente, de condicionar beneficios sociales a cambio de apoyo político.
“Debemos erradicar las prácticas que atentan contra la dignidad y los derechos de las personas”, enfatizó en Tribuna Morón Orozco.
En un momento de su alocución, Raúl Morón aprovechó para reconocer el trabajo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), organismo que ha alcanzado un alto nivel de autonomía y ha permitido contar por primera vez en la historia con una medición consistente de la pobreza, y con una evaluación más objetiva e imparcial de los programas sociales.
“Quedaron en el pasado las cifras de pobreza maquilladas de los gobiernos federales, que actuaban como juez y parte al evaluar el desempeño de sus propias políticas. Las cifras del CONEVAL nos demuestran el fracaso de la estrategia de desarrollo actual, que sigue arrojando a millones a la pobreza, en vez combatirla. Pero sus informes no han revelado también un panorama bastante desastroso por lo que se refiere a los programas sociales”.
El coordinador del tema social en el grupo parlamentario del PRD en el Senado de la República emprendió un análisis de la política social de los últimos sexenios, incluido el actual: Grandes problemas de dispersión y falta de coordinación entre instancias federales y de éstas con los estados. Cobertura limitada de programas, disociación con los derechos sociales, duplicidades, conflictos de sostenibilidad y de financiamiento. Existe una tendencia a crear programas, sin que esté clara su justificación, el diagnostico ni los criterios de asignación de prestaciones. Hay rezagos considerables en materia de transparencia y evaluación, lo cual es más marcado en algunos gobiernos estatales.
Por ello, en el marco de la presentación de su iniciativa, Morón Orozco destacó que en el Sistema Nacional de Programas Sociales estaría normado por la Ley General de Desarrollo Social, un ordenamiento aprobado por consenso de todas las fuerzas políticas, que tuvo la virtud de institucionalizar el enfoque de derechos sociales en las políticas y programas sociales.
“Con esta propuesta, buscamos hacer más efectivos los esfuerzos de los tres órdenes de gobierno. Ello, con pleno respeto a las atribuciones que corresponden a cada uno de ellos, bajo una clara visión federalista de la política social. Se trata de contar con una política integral que vincule diagnostico, programas, padrones y evaluaciones. Que evite la tendencia al inmediatismo y la discrecionalidad excesiva”, ejemplificó Morón Orozco.
El Sistema contempla los siguientes componentes:
• Un Diagnostico Social Integrado, que es un instrumento inédito, un paso fundamental para tener un panorama completo de la cuestión social en nuestro país, para que conozcamos la visión de los distintos órdenes de gobierno, del CONEVAL, de los organismos homólogos en los estados.
• La Base de Datos Nacional de Programas Sociales garantizará que las dependencias federales y estatales intercambien, hagan pública y transparente la información de los programas existentes.
• Con ella, se harán más efectivos los procesos de planeación, programación, presupuestación y evaluación.
• El Registro Único de Beneficiarios, permitirá dar seguimiento a la situación de las familias mexicanas destinatarias de los programas, evitar exclusiones injustas y romper con manejos clientelares. Facilitará la evaluación del impacto social de los programas y sus resultados en la transformación de las condiciones de vida.
La iniciativa establece una regulación básica de los programas, sin desconocer que existen normas dispersas al respecto:
• En primer lugar, por mandato de la Ley, la universalidad de los derechos sociales será el fundamento para el diagnostico, diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de los programas sociales.
• Se hará transparente la información de todos los programas, objetivos, prestaciones o beneficios que incluyen, metas, indicadores, recursos presupuestales, normatividad y los lineamientos con que cuenten para su ejecución.
• Los programas deberán contar con mecanismos de participación ciudadana en todas sus etapas, diagnostico, diseño, implementación, seguimiento y evaluación.
• La lógica del paternalismo deberá quedar atrás para inaugurar la etapa de la ciudadanía social, de los programas sociales de corte democrático.
• El Sistema, hará posible una evaluación conjunta de todos los programas. Será un instrumento que revele los desafíos que enfrentamos para construir una auténtica política de Estado.
• Además, los resultados de la Evaluaciones del CONEVAL tendrán carácter vinculatorio para las dependencias federales. Así, se corregirán las distorsiones e inconsistencias.
“Estoy consciente de que el país requiere un viraje en la política social y en la política económica. También, que la situación de México no está para dilapidar esfuerzos o recursos. Regular los programas es sólo una parte, se requieren muchas cosas para que haya condiciones de vida digna, justicia social, para aminorar las enormes desigualdades”, enfatizó Raúl Morón Orozco.