Ahuizote Agencia de Información Ahuizote.com
Morelia, Mich., 20 de julio del 2013.- A lo largo de la historia, mujeres y hombres han asumido formas de ser como una cuestión intrínseca a su género. Se ha dicho, por ejemplo, que las mujeres son el sexo débil, sumiso y abnegado, y que los hombres representan la fuerza, la racionalidad y la protección. Sin embargo, se ha demostrado que estos prototipos que se aceptado como algo natural, no son más que productos culturales.
“Muchos de los estatutos de lo que la gente considera femenino o masculino ha sido una construcción de largo aliento, en donde muchas veces respondemos a una forma de ser sin la conciencia de dónde viene, a qué responde”, señala la investigadora de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), Adriana Sáenz Valadez.
A través de la investigación titulada “Prototipos, cuerpo, género y escritura”, que coordina la Doctora en Humanidades, se estudian en los productos culturales, las dicotomías de sexo que el proceso de la modernidad y la ilustración establecieron y que posicionaron prototipos del deber ser para los hombres y mujeres.
“Estas configuraciones que la racionalidad patriarcal estableció, llevaron a delimitar concepciones que se instituyeron como comprensiones inamovibles, acepciones culturales que se asumieron como naturales, y en ello se instauraron como el deber ser para los sexos, digamos prototipos para los sexos. En este sentido, se asumieron deberes ser y formas culturales de acción”, especificó.
La profesora de la Facultad de Filosofía ha investigado desde hace varios años, la relaciones entre prototipos, cuerpo, género y escritura en las manifestaciones culturales, principalmente en la literatura, a fin de demostrar la imperativa necesidad de de-construir, repensar y discutir estos modelos planteados como ideales.
Se planteó la necesidad de estudiar a la racionalidad patriarcal y al ser y su hacer en ella, sostiene Sáenz Valdez, porque al analizar las relaciones entre los prototipos de género, el cuerpo como espacio de significación, representación y lugar de la memoria, donde los sexos y los géneros se han conformado como cuerpos simbólicos; se han estudiado algunas representaciones de los prototipos que los hombres y mujeres han asumido.
Una de las variables que destaca es el cuerpo, ya que como señaló el filósofo francés, Michel Foucault, éste es un extracto enteramente cultural –y no biológico-, en el que se exhibe el deber ser para cada sexo. “En el atuendo, en la forma de sentarnos, en las comidas, estamos viviendo las estructuras culturales, que si bien se asumen como naturales, no lo son”.
El resultado de dicho estudio, en la que colaboran alrededor de veinte investigadores de universidades nacionales e internacionales, se materializará en dos libros, cuya publicación saldrá en Septiembre con la colaboración la Universidad Michoacana, la Universidad de Guadalajara (U de G) y la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), las Secretarías de la Mujer y de Cultura del Estado.
Cabe destacar, que la sinergia con otras instituciones educativas se logró gracia al segundo Coloquio Internacional “Prototipos, cuerpo, género, cuerpo y escritura”, que se realizó en 2012, y que fue coorganizado entre la UMSNH y la U de G, en el que participaron especialistas de la máxima casa de estudios en la entidad, de la Universidad de Guadalajara, del Instituto Tecnológico de Monterrey, de la Universidad Autónoma de Nuevo León, y de Universidades de España, Estados Unidos, Argentina y Perú.
A partir de este esfuerzo se planea llevar a cabo un coloquio en 2014 con la coorganización de la U de G y la UANL, pero siempre con el liderazgo de la UMSNH.
