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La inflación al consumo de México se desaceleró por segundo mes consecutivo en diciembre y cerró el 2024 en su menor nivel desde febrero de 2021 y lejos de aquellos datos históricos alcanzados en el 2022 (8.70 por ciento anual), reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en 4.21 por ciento anual en diciembre de 2024, muy por debajo de la previsión media de los economistas encuestados por Citi, después de un dato previo de 4.55 por ciento anual.
La inflación general anual de 2024 descendió a un mínimo desde febrero de 2021, cuando registró una tasa de 3.76 por ciento anual; toda vez que es el mejor cierre de año desde diciembre de 2020 (3.15 por ciento). No obstante, quedó fuera del rango superior de la meta de estabilidad de precios del Banco de México (de entre 3 y 4 por ciento), y acumuló 46 meses fuera de la meta del banco central.
La moderación de la inflación en México se debió al descenso de los precios de las mercancías y de las mercancías no alimenticias; no obstante, los servicios, entre los que destacan las fondas, torterías, taquerías; así como aéreos; los productos agropecuarios y los energéticos fueron más onerosos en los últimos 12 meses.
El índice de precios subyacente, que excluye de su cálculo la energía y los alimentos frescos, así como determinar la trayectoria de los precios en el mediano y largo plazo aumentó a 3.65 por ciento anual, ligeramente por encima de las expectativas, tras un dato previo de 3.58 por ciento.
En tanto, el índice de precios no subyacente, que incluye productos agropecuarios y energéticos, registró una variación de 5.95 por ciento anual.
