Washington, 10 de septiembre (AP).- Kamala Harris y Donald Trump intercambiaron el martes ataques políticos y personales mientras presentaban sus contrastantes visiones para el país en cuestiones como el aborto, la migración y la democracia de Estados Unidos durante su primer, y quizás único, debate antes de los comicios presidenciales de noviembre.
La Vicepresidenta demócrata trató varias veces de provocar al expresidente republicano, recordándole en varias ocasiones la derrota electoral que él aún niega, y burlándose de algunas otras de sus afirmaciones falsas.
Harris no sólo trató de presentar argumentos de que Trump no es apto para desempeñar el cargo, sino que trató de usar sus respuestas de tal forma que parecían diseñadas para provocarlo a lanzar ataques personales, de los que sus asesores y simpatizantes han tratado de alejarlo. En cierto punto, Harris se volteó a ver a Trump y dijo que como vicepresidenta, he hablado con dignatarios extranjeros “y dicen que usted es una vergüenza”.
Trump volvió a negar su derrota ante el Presidente Joe Biden hace cuatro años, cuando sus intentos por revertir el resultado dieron lugar a la insurrección del 6 de enero de 2021 en el Capitolio federal.
“Donald Trump fue despedido por 81 millones de personas”, dijo Harris. “Así que dejemos eso en claro. Y evidentemente le cuesta mucho trabajo procesar eso”.
Trump, en cambio, trató de relacionar a Harris con Biden, preguntándole por qué no había tomado acciones sobre sus propuestas mientras se desempeñaba como vicepresidenta, y centró sus ataques contra Harris en la asignación que le encargó Biden de lidiar con las causas de raíz de la migración ilegal.
En varias ocasiones se refirió a ella y a Biden como personas débiles, y mencionó los elogios del primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, para demostrar que es sumamente respetado por dignatarios de todo el mundo, asegurando que Orbán lo llama “la persona más temida”.
El enfrentamiento le brindó a los estadounidenses la mirada más detallada hasta el momento a una campaña que ha cambiado drásticamente. De inmediato, Harris presentó los argumentos demócratas de una mejor manera de lo que lo hizo Biden durante su debate de junio, vinculando al expresidente con las labores del Partido Republicano para restringir el acceso al aborto, y acusándolo de socavar la democracia del país.
Durante el encuentro, Trump repitió su habitual alarde de que lograría la paz entre Ucrania y Rusia en un día si es elegido, pero no dice cómo.
El temor de los partidarios de Ucrania es que el tipo de acuerdo del que habla Trump equivaldría a que el gobierno democrático de Ucrania, respaldado por Estados Unidos, capitulara ante las duras demandas de su vecino más grande. El Presidente ruso, Vladimir Putin, ha insistido en que Ucrania debe ceder vastas extensiones de territorio y renunciar a unirse a la OTAN. Eso es simplemente una condición para iniciar las conversaciones para poner fin a la invasión rusa de Ucrania, que dura dos años y medio.
Por su parte, Harris se mantuvo fiel a sus líneas familiares sobre cómo manejaría la vorágine en Medio Oriente, incluyendo respaldar firmemente la defensa de Israel y al mismo tiempo presionar por un Estado palestino.
Trump, por su parte, dice que el Medio Oriente estaba en relativa paz bajo su mandato y argumentó que Hamas, respaldado por Irán, nunca habría lanzado el audaz ataque del 7 de octubre que desató la guerra en Gaza si él fuera presidente.
“ Eso nunca habría sucedido”, dijo Trump. “Irán estaba en quiebra bajo el gobierno de Donald Trump. Ahora Irán tiene 300 mil millones de dólares porque le quitaron todas las sanciones que yo tenía. Irán no tenía dinero para Hamás ni para Hezbolá ni para ninguna… esfera del terrorismo”.
“Quieren traer a su país de regreso. Quieren tener a América Grande Otra Vez”, dijo Donald Trump ante el problema de migración en Estados Unidos. Además, señaló que, si Kamala Harris gana, el país “sería un Venezuela en esteroides”.
El republicano reafirmó los comentarios desmentidos por autoridades sobre el supuesto abuso y daño a mascotas por parte de migrantes haitianos en la ciudad de Springfield, Ohio.
J.D Vance, compañero de fórmula de Trump, hizo eco de desinformaciones que circulan en redes sociales sobre migrantes haitianos que presuntamente se comen mascotas y animales salvajes una vez que entran por la frontera estadounidense para sobrevivir.
Trump vuelve a distanciarse del Proyecto 2025, el proyecto de la Heritage Foundation elaborado por decenas de ex funcionarios de su administración. “No lo he leído. No quiero leerlo, a propósito. No lo voy a leer”, dice.
Los demócratas han hecho de las propuestas profundamente conservadoras la pieza central de sus ataques contra Trump.
El candidato republicano Donald Trump sustentó su voto en contra de una iniciativa en Florida que derogaría la prohibición estatal del aborto al argumentar que existen estados donde supuestamente dejarían nacer al bebé y después, se decidiría qué hacer con él, sugiriendo una “ejecución”.
La pregunta señalada por la moderadora corresponde a cuando el expresidente Trump dijo que votará en contra de una iniciativa electoral de Florida que derogaría la prohibición estatal al aborto después de la sexta semana de embarazo, un día después de que pareció indicar que votaría a favor.
Trump dijo que considera que la prohibición de Florida es un error, y dijo en una entrevista con Fox News Channel el viernes: “Creo que a las seis semanas necesitas más tiempo”. Pero después dijo: “Al mismo tiempo, los demócratas son radicales”, y repitió las afirmaciones falsas que ha hecho frecuentemente sobre los abortos en etapas avanzadas del embarazo y dijo que se oponía a permitir abortos hasta los nueve meses.
La iniciativa electoral de Florida legalizaría el aborto hasta la viabilidad fetal, un término utilizado por los médicos para describir si se espera que un embarazo siga desarrollándose con normalidad o si un feto podría sobrevivir fuera del útero. Generalmente se considera que es alrededor de las 23 o 24 semanas, lo que equivale a unos seis meses.
Al punto de las 19:00 horas (tiempo de la Ciudad de México) comenzó el debate presidencial entre ambos candidatos. En un primer encuentro, al hablar sobre si la economía de EU ha sido mejor en los últimos cuatro años, Kamala aseguró que su contrincante quiere seguir quitándole impuestos a los más ricos.
“No, no… yo no quiero hacer eso”, dice Trump. “Lo que quiero es que el resto del mundo nos pague lo que hemos gastado en ellos, cobrarles los aranceles a China. Esto ha sido un desastre para la clase media, y ahora están entrando millones a nuestro país, gente que viene de las cárceles, están tomando los pueblos, los edificios, eso es lo que ella y Biden han permitido”, contestó.
Harris le respondió que así dejó las cosas el propio Trump. “Lo que hemos hecho es limpiar el desastre que él dejó, incluyendo los problemas de salud mental”.
¿QUÉ ESPERAR DEL DEBATE?
El debate dará a los estadounidenses la más detallada visión de una campaña que cambió drásticamente desde el último debate en junio. En un breve periodo, el Presidente Joe Biden se retiró de la contienda tras su desastroso desempeño en el debate, Trump sobrevivió a un intento de asesinato, y ambas partes eligieron a sus compañeros de fórmula.
Harris está decidida a demostrar que puede presentar los argumentos demócratas contra Trump mejor de lo que lo hizo Biden. Por su parte, Trump intenta presentar a la Vicepresidenta como una liberal desconectada de la realidad, mientras trata de ganarse a los votantes escépticos de que deba volver a la Casa Blanca.
Trump, de 78 años, ha tenido dificultades para adaptarse a Harris, de 59, que es la primera mujer y la primera persona de ascendencia negra y surasiática en ocupar la Vicepresidencia. El expresidente republicano ha recurrido en ocasiones a invocar estereotipos raciales y de género, frustrando a los aliados que desean que Trump se centre en las diferencias políticas con Harris.
Por su parte, la Vicepresidenta tratará de reclamar parte del crédito de los logros del Gobierno de Biden, al tiempo que aborda sus momentos más bajos y explica su alejamiento de las posturas más liberales que asumió en el pasado.
El debate sujetará a Harris, que sólo ha tenido una entrevista formal en los últimos seis meses, a un infrecuente momento de cuestionamiento sostenido.
“Si tiene un gran desempeño, será una agradable sorpresa para los demócratas, y estos se regocijarán”, dijo Ari Fleischer, estratega de comunicaciones republicano y exsecretario de prensa del presidente George W. Bush. “Si fracasa, como lo hizo Joe Biden, ello podría abrir esta contienda de par en par. Así que hay más en juego”.
Las encuestas muestran que la Vicepresidente Kamala Harris llegará al debate presidencial, según los estadounidenses, como la candidata honesta, comprometida con la democracia y alguien que se preocupa por personas como ellos, de acuerdo a una encuesta de AP-NORC de agosto.
Sin embargo, el expresidente Donald Trump le lleva ventaja a Harris en lo que respecta a que los estadounidenses piensan que está mejor posicionado para manejar los problemas de la economía y la inmigración. Mientras que Harris tiene ventaja en Trump en lo que respecta a manejar cuestiones relacionadas con la raza y la desigualdad racial, la política del aborto y la atención médica.
Los estadounidenses también esperan que se muestre como una candidata serena; aproximadamente el 40 por ciento de la población dice que la frase “disciplinada” la describe mejor que a Trump. Y aunque Trump ha pasado la campaña defendiéndose como un líder fuerte, capaz de manejar las crisis difíciles que enfrenta el país, la encuesta AP-NORC muestra que los estadounidenses en general no le dan una ventaja sobre Harris en esos rasgos.
La fortaleza de Trump actualmente reside en el hecho de que los estadounidenses tienen una probabilidad ligeramente mayor de confiar en Trump que en Harris cuando se trata de manejar la economía o la inmigración. Los independientes tienen aproximadamente el doble de probabilidades de confiar en Trump que en Harris en cuestiones económicas.
Algunos demócratas esperan que Trump mantenga la confianza que le dio a partir de junio en el pasado debate contra Joe Biden. La diferencia, señalan, es que Harris no tiene 81 años y tiene antecedentes de debates exitosos, incluso si el martes por la noche es su primer debate presidencial en las elecciones generales (será el séptimo de Trump).
“Esta vez, esto podría volverse en su contra, porque, en la medida en que la gente lo escucha, él ha bajado mucho el listón para ella y lo ha elevado mucho para sí mismo”, dijo Tim Hogan, quien dirigió los preparativos del debate de la senadora Amy Klobuchar en la temporada de primarias presidenciales demócratas de 2020. “Si Trump presenta una actuación como la que tuvo en el último debate, que la gente dijo que ganó, perderá esta vez”.
Según las estadísticas, si Trump gana las elecciones de noviembre, a sus 78 años, será la persona de mayor edad elegida para la presidencia. Una nueva encuesta del Pew Research Center revela que aproximadamente la mitad de los votantes creen que su edad perjudicará su candidatura. Mientras que el tres por ciento de los votantes cree que su edad lo ayudará, y el resto dice que no hará ninguna diferencia.
En cambio, los resultados son todo lo contrario para Harris, que a sus 59 años, es casi dos décadas más joven que su oponente. Aproximadamente la mitad de los encuestados dice que su edad la ayudará, mientras que solo el tres por ciento dice que la perjudicará.
Con Harris como candidata demócrata, Trump puede haber perdido una ventaja sobre el presidente Joe Biden: la percepción de que está más preparado mentalmente para el cargo. Aproximadamente 6 de cada 10 votantes dicen que la frase “mentalmente agudo” describe a Harris muy o bastante bien, mientras que aproximadamente la mitad dice lo mismo de Trump. En julio, cuando Biden todavía era su oponente, aproximadamente 6 de cada 10 votantes dijeron que Trump era “mentalmente agudo”, mientras que solo una cuarta parte dijo lo mismo de Biden.
Asimismo, se prevé que la candidatura de Kamala Harris será histórica si es elegida como sucesora de Joe Biden, debido a que será la primera mujer Presidenta, así como la primera estadounidense de origen asiático y la primera mujer negra al frente de la Casa blanca.
Con información de SinEmbargo