- Ni el crimen organizado ni conferencias matutinas influyeron en la decisión de 36 millones de votantes a favor de Sheinbaum.
CDMX, 12 de agosto del 2024.- La elección presidencial del pasado 2 de junio «es totalmente legítima» y por primera vez en la historia de México una mujer es la triunfadora, determinó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), al confirmar que seis de cada diez mexicanos votaron por la candidata Claudia Sheinbaum Pardo.
«La ciudadanía decidió de manera contundente que sea una mujer la que obtenga el triunfo y el segundo lugar también fue mujer y esto es histórico», aseveró la magistrada presidenta del tribunal electoral, Mónica Soto Fregoso.
No hubo ninguna irregularidad «plenamente acreditada» como alegaron los partidos PAN, PRD y PRI, por lo que sus juicios para impugnar la elección presidencial «resultaron deficientes y no demostraron ninguna irregularidad veraz en la elección presidencial “, aseveró el magistrado Felipe de la Mata Pizaña.
En su detallada exposición, el magistrado puntualizó que los partidos no presentaron pruebas fehacientes para demostrar que el crimen organizado favoreció a la presidenta electa ni que las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador influyeran en la decisión de los 60 por ciento de los ciudadanos que ejercieron su voto a favor de Claudia Sheinbaum.
«Tras un análisis minucioso y transparente de las pruebas se comprueba que no se transgredió la elección presidencial. Los votos fueron contundentes y los resultados lo demostraron», puntualizó el magistrado Felipe Fuentes Barrera,.
Ambos magistrados integraron la comisión especial sustanciadora encargada de analizar a fondo los tres juicios que interpuso la oposición, y por primera vez un proyecto de dictamen para la declaratoria de validez de la elección presidencial se hizo público antes de su discusión en la sesión pública.
Los dos magistrados decidieron publicar un micrositio para difundir los juicios que analizarían, además de difundir una audiencia pública que llevaron a cabo el pasado 6 de julio para que los partidos de la oposición y la ex candidata Xóchitl Gálvez sustentaran las más de mil 600 pruebas presentadas en sus juicios de inconformidad.
El pasado 24 de julio está comisión especial concluyó el estudio de los tres juicios y difundió el proyecto de resolución en los que determinó infundados y «deficientes» los argumentos y pruebas que presentaron los partidos, porque tampoco pudieron demostrar el uso de los programas sociales para coaccionar el voto, ni tampoco se comprobó injerencias de sindicatos a favor de Morena y su candidata.
«Para anular la elección presidencial las irregularidades deben ser graves y eso no se demostró», afirmó el magistrado Fuentes al exponer la segunda parte del proyecto de resolución.
Tras la basta y detallada exposición del proyecto por los dos magistrados de la comisión especial, la magistrada Claudia Valle tomó la palabra para dar cuenta de su posicionamiento, el cual avaló la propuesta.
Después fue la magistrada Janine Otálora quien manifestó su postura. Subrayó que es fundamental que este ejercicio se realice con la máxima transparencia y que forman parte de la última fase del proceso electoral para la transición pacífica del nuevo gobierno.
Sin embargo, señaló no estaba a favor de desechar el juicio que presentó Xóchitl Gálvez, pues al ser la candidata que quedó en segundo lugar en esta elección, sí tenía interés jurídico su impugnación.
Tampoco compartió que las intervenciones del titular del Poder Ejecutivo haya sido «hechos aislados», pues en procesos electorales anteriores en los que intervinieron los mandatarios, está máxima instancia electoral lo hizo evidente y pidió que se abstuvieran.
Además, consideró que la violencia sí influyó en este proceso electoral, pues hubo reiterados llamados y advertencias sobre este problema en el país. «Desestimar estas alegaciones es un desacierto» lamentó.
Su posicionamiento fue compartido por el magistrado Reyes Rodríguez, quien calificó de superficial el proyecto del dictamen elaborado por sus dos pares, con lo que dejó entrever la rivalidad que tienen, así como las diferencias políticas en sus decisiones.
«El proyecto carece de un análisis metodológico riguroso. Carece de visión integral electoral», aseguró tras señalar que las expresiones del presidente sí influyeron en las elecciones, aunque no determinaron los resultados.
También lamentó que en el proyecto de resolución no se haya valorado el contexto en los hechos de violencia, porque eso refleja «insensibilidad» por parte de los juzgadores que elaboraron el proyecto.
«Es un intento inútil ocultar los hechos que se presentaron durante el proceso electoral», reclamó.
No obstante, reconoció que resultan infundadas las causas de nulidad porque la elección de junio se llevó a cabo «con éxito», dónde las preferencias de los ciudadanos fueron «robustas» hacia Claudia Sheinbaum.
Por último, la magistrada presidenta Mónica Soto Fregoso explicó sus razones por las que estaba a favor del proyecto, así como de la forma como se hizo el análisis.
Así, tras casi cuatro horas de vapulear a los partidos de la oposición y de la misma Xóchitl Gálvez, de debatir sobre la injerencia del presidente López Obrador y de la violencia, la magistrada presidenta afirmó: «No ha lugar a la nulidad de la elección presidencial en la que resultó triunfadora Claudia Sheinbaum», decisión que fue aprobada por unanimidad por los seis magistrados.
Con información de La Jornada