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Morelia, Mich., 24 de marzo del 2013.- (Por Ignacio Herrerías) Tras las últimas heladas registradas en Michoacán incrementó a 50 el número de ayuntamientos que reportan siniestrados por lo menos 16 cultivos, son severas afectaciones que sufrieron y se perdió más del 80 por ciento las cosechas en la mayoría de los municipios afectados, afirmó el diputado Erik Juárez Blanquet, tras demandar a las autoridades atender y brindar atención de manera urgente a quienes se vieron afectados, ya que hay tortuguismo en la atención a la gente del campo que ha denunciado sus pérdidas.
El presidente de la comisión de Desarrollo Rural en la LXXII Legislatura de Michoacán, Erik Juárez, señaló que si bien SEDRU en la entidad ha emprendido acciones para medir la magnitud del daño, y así hacer la gestión de los recursos ante la federación para apoyar a los productores que son víctimas de estos siniestros, lo cierto es que los campesinos están desesperados y es de urgente resolución el que se comience a liberar los recursos del Programa de Apoyo a las Contingencias Climatológicas .
Además el diputado local integrante del grupo parlamentario del PRD sostuvo que es apremiante que el gobierno de Michoacán instrumente un programa emergente de apoyo a miles de campesinos que perdieron casi todo.
Se requiere que los productores afectados sean considerados una prioridad en los padrones de beneficiarios de los programas que impulsa el desarrollo agropecuario en la entidad, y que se les considere como a los primeros a los que se les apoye con el fertilizante y la semillas para siguiente ciclo agrícola.
Por ello el diputado Erik Juárez volvió a hacer un llamado al Ejecutivo del Estado para que haga un esfuerzo extraordinario a favor del campo michoacano y que ponga en marcha en los municipios siniestrados los programas de alimentación, empleo temporal y proyectos productivos, pues miles de jornaleros agrícolas y por este ciclo no tienen como subsistir.
“ojala que tengan sensibilidad suficiente para devolverle la mirada completa a esta problemática que pone en riesgo la viabilidad de la vida en el medio rural”.
Erik Juárez agregó que a la par del trabajo que pueda realizar la SEDRU con lo relacionado a las gestiones ante la federación para atender dicha contingencia, es necesario la implementación dé otras acciones para que libere la presión que sufren miles de campesinos que perdieron todo.
Consideró oportuno que se anticipen los apoyos y subsidios del PROCAMPO y ofertar con la banca de gobierno créditos baratos y oportunos a los productores para que puedan sembrar sus parcelas en el próximo cielo productivo.
Ante la grave crisis que atraviesan los municipios siniestrados recordó que presentó un punto de acuerdo en el pleno, sin embargo, la población afectada insiste en qué no hay respuesta de las autoridades.
A más de 20 días de que se registraran las primeras heladas que siniestraron los cultivos en Michoacán de 41 municipios, y tras reportarse en los últimos días otras heladas se aumentó a 50 el número de municipios afectados, no hay respuesta que beneficie o resuelva la dificultad que están sufriendo miles de campesinos en la entidad.
Erik Juárez dejó claro “el problema ahora no radica sólo en pérdidas de los cultivos, sino se complica más ya que los jornaleros agrícolas cuya subsistencia depende del trabajo en el campo hoy no tienen una tienen una fuente de empleo”.
Además el legislador perredista explicó que las circunstancias que hoy tienen que enfrentar los pequeños y grande productores de hortalizas, granos y legumbres no es cosa menor, pues muchos de ellos se alimentan de su producción a través de crédito y refinanciamiento.
Es decir que los productores tendrán que pagar lo que les prestaron para la producción del campo, y si no se les reestructura la deuda que contrajeron para producir sus tierras, los intereses los afectarán más de lo que la propia autoridad pueda contemplar.
Recordó que el Congreso de la Unión ya hizo lo propio pidiendo que los estados de Michoacán y Guanajuato sean declarados zona de desastre, pero no se ha hecho nada al respecto.
Para medir el impacto económico que están sufriendo los municipios, Erik Juárez explicó un productor de trigo, tiene un gasto de inversión por hectárea entre 12 a 14 mil pesos por hectárea, por lo regular siembran entre 3 y 4 hectáreas, por lo que su costo de inversión es de 50 mil pesos aproximadamente. Mientras un productor grande se estima invierte en las tierras entre 500 mil y un millón de pesos, y los que no aseguraron sus cultivos hoy están al borde del colapso.
Finalmente urgió a que se le dé la atención que requiere el campo, toda vez que la situación es muy crítica para las zonas siniestradas, por ejemplo dijo los productores de fresa por una hectárea invierten 100 mil pesos, y para los productores de hortaliza los recursos que invierten en la tierra constituye prácticamente su patrimonio.
