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(Por José Cruz Delgado/ Corresponsal)
Morelia, Mich., 20 de noviembre del 2020.- El Jefe Regional en Morelia, Alberto Frutis, con el la finalidad de llamar la atención y atraer simpatías de los morelianos, pasó por alto las instrucciones del gobierno del estado, quien acordó que no se permitiría la instalación de comerciantes e las inmediaciones del Santuario de la Virgen de Guadalupe de Morelia para evitar contagios por Covid-19.
Sin embargo, el funcionario, de manera irresponsable les abrió la posibilidad a los oferentes de que se instalaran, y abarrotaran, como cada año esa parte de la ciudad, mientras que el gobernador Silvano Aureoles Conejo había decidido su no instalación y evitar de esa manera la propagación del virus en un acto de responsabilidad.
El funcionario no solamente debe ser sancionado, sino despedido por su actuar, pues siendo un funcionario menor debe acatar las órdenes que se le dan y no contradecir, sobre todo cuando está en juego la salud y la vida de los morelianos, todo en el afán de lograr apoyos para su proyecto personal, y lo que es más grave fue su deslealtad hacia el Ejecutivo estatal.
