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Por Gerardo Espinosa.- Está claro que los grandes responsables del quebranto del OOAPAS son los gobierno municipales del PRI y el PAN, por tal razón Fausto Vallejo Figueroa, Salvador López Orduña y Juan Luis Calderón Hinojosa deben dar la cara y explicar el quebranto, pero más aún el alcalde Wilfrido Lázaro Medina tiene la obligación de solicitar inmediatamente la intervención de la Auditoria Superior de la Federación y la del Estado para deslindar responsabilidades.
Técnicamente el agua de Morelia no debería ser la más cara del país, pero lo es, para ello basta algunos ejemplos comparativos, en el caso de Tijuana, Baja California, llevar el agua a los hogares de esa ciudad requiere de la operación diaria de uno de los más grandes acuaféricos del país, ya que llevan el agua desde el valle de Mexicali ubicado a una distancia de 140 kilómetros y tienen que bombearla con grandes maquinas hidráulicas de cero metros sobre el nivel del mar a los cuales se encuentra Mexicali a casi 1100 metros hasta la parte alta de la sierra conocida como la rumorosa, esos dos aspectos la distancia y el bombeo a tales alturas son suficientes para que el agua de Tijuana sea de las más caras del país, pero no es la más cara.
El lugar que tiene el deshonroso primer lugar con la tarifa más alta lo ocupa Morelia, ya que en base al estudio oficial de SEMARNAT respecto a la situación del agua 2011, Tijuana ocupa el 3er lugar en el costo del agua, pagándola a 14.94 metro cubico, 2do lugar Aguascalientes que es una zona semidesértica paga su agua a 16.89 y Morelia el más caro del país pagando un costo de 21.34 metro cubico, cuando las condiciones geográficas para obtener el agua en Morelia son mucho más benéficas y cercanas, esta información está disponible enwww.conagua.gob.mx/OCB07/
Los consejeros de Morena Oscar Celis, Hugo Gama y Alfredo Flores señalaron que, “por supuesto que hay que hablar técnicamente del problema del agua en Morelia, ese análisis nos daría como resultado que el verdadero asunto es político administrativo y no técnico, es cierto que las carencias en la red de suministro son reales, pero lo que realmente ha afectado al OOAPAS son decisiones políticas y administrativas, de ahí la inaplazable necesidad de una auditoria que nos muestre cuales fueron las omisiones, errores, decisiones y dadivas políticas que tienen al organismo en una quiebra técnica”.
De igual manera señalaron los consejeros estatales del Movimiento de Regeneración Nacional que “el OOAPAS se ha convertido en un nicho de dadivas políticas las cuales el PRI las sabe explotar muy bien, tenemos como ejemplo a las colonias de Antorcha Campesina que no pagan por el servicio del agua y más aun toda la obra de infraestructura hídrica la pagó directamente el OOAPAS, aunado a que un gran número de desarrolladores de fraccionamientos privados disfrutan de obras similares y no las cubren al erario público”.
“El PAN también carga de manera directa con gran parte de esta responsabilidad recordemos que en los últimos 7 años el director general del OOAPAS fue Juan Luis Calderón Hinojosa, hermano de Felipe Calderón Hinojosa y que el propio gobierno municipal del PAN periodo 2005-2007 gobernó el panista Salvador López Orduña y que en conjunto con el periodo de Fausto Vallejo Figueroa del 2008-2011 las tarifas de agua en Morelia aumentaron cerca de 64%, siendo esos periodos cuando se dio el quebranto del organismo, por lo que no hay duda que tanto el PAN como el PRI son los únicos responsables del quebranto”, señalaron los consejeros estatales de Morena.
Mientras no se clarifique y se tenga información confiable sobre el desfalco ocurrido en el OOAPAS, y se continúe ocultando la verdad, queda de manifiesto que Wilfrido Lázaro responde a los intereses de Fausto Vallejo y por ello lo encubre abierta y descaradamente, los ciudadanos de Morelia merecemos una explicación clara de esta situación generada por el PRI y PAN, que expliquen porque un subdirector ganaba 110 mil pesos y el director general 180 mil pesos mensuales, autorizándosele a Juan Luis Calderón Hinojosa una liquidación superior a los 600 mil pesos, aunado a que los grandes morosos al OOAPAS son instancias de gobierno, empresas privadas y fraccionamientos privados.
Cabe señalar que las prestaciones de los trabajadores de base no son la causa principal del quebranto del organismo tal y como Wilfrido Lázaro pretende hacer creer a los morelianos y a la opinión pública, desviando de esta manera la atención para esconder que la situación la generaron los gobiernos del PRI y PAN.
Insano y absurdo es no auditar y deslindar responsabilidades concretas a este gran fraude, por salud pública el actual Ayuntamiento debe ser abierto y respetuoso de los ciudadanos, evitar engañarlos como lo hace en este tema del agua. Corremos el riesgo de que el agua en Morelia sea impagable y se convierta en un servicio de lujo, inaccesible para la mayoría de la población, esto contraviene al derecho humano de acceso al líquido contemplado en la Constitución Federal y en tratados internacionales.
