Columna Política «Ensalada de Grillos», Por Ciro Castillo (29-VII-2020).- Qué difícil caso el del médico Vicente Grajales Yuca, acusado por abuso de autoridad, corrupción y ahora de “acoso sexual”.
Es difícil el caso del detenido en Tuxtla Gutiérrez, por dos razones:
Primero, porque detener a un “galeno” en medio de la pandemia del COVID_19, donde muchos de ellos realmente se están jugando el pellejo salvando vidas, puede resultar impopular y generar costos políticos, pero ¿y si es responsable de los señalamientos en su contra?.
Segundo, es complejo porque así como él tiene familia y amigos que le han defendido, también está la contraparte, la afectada.
Este martes, el testimonio de Karen Alejandra Ramírez Molina, hija del fallecido Miguel Arturo Ramírez López, precisamente por COVID, dio un giro a la polémica, pues ella asegura que no está acusando al médico en cuestión de negligencia, sino de abuso de poder, corrupción y acoso sexual.
Queda claro que, en este y todos los casos, la aplicación de la ley tiene siempre dos partes,
dos caras de la moneda…
LA POLÉMICA
Si usted que nos lee fuera juez o el Fiscal del estado qué haría. ¿Aplicaría la ley a rajatabla contra un médico, en este caso el urgenciólogo Vicente Grajales Yuca, a sabiendas de que es un personaje conocido y popular, sobre todo en medio de la pandemia?
¿La aplicaría, a sabiendas de que estamos en medio de una pandemia donde los hombres y mujeres de blanco, además de todo el personal de salud, son los héroes con bata?
Insistimos, por un lado están los que dicen que el médico del Hospital Vida Mejor del ISSTECH es un buen especialista que, incluso ha salvado muchas vidas en medio de una epidemia terrible.
Sin embargo, por el otro hay testimonios de afectados que, aseguran, al médico le gusta el dinero y estuvo abusando de su cargo y habilidades, precisamente en medio de una epidemia que ha dejado más de 42 mil muertos en todo el país. Las dos caras de la moneda…
TESTIMONIOS
Mientras un grupo de médicos, apoyados por el Sindicato de Salud marcharon este martes, se empezaron a conocer testimonios como el de la doctora María Antonieta Herrera Díaz, quien asegura que ya había presentado una denuncia contra el médico señalado.
Le acusa de cobrar cinco mil pesos diarios para atender a sus familiares que enfermaron de COVID_19 en los primeros días de junio. La “cobradora”, dice, era una persona de nombre Ana Paola Rubiano Murcia, supuesta fisioterapeuta.
La cifra inicial de cinco mil pesos subió a 10 mil cuando ya fueron dos los pacientes internados en el ISSTECH.
Vía Facebook, en una cuenta a nombre de Gustavo Cervantes, se asegura que fue “objeto de tentativa de extorsión por el propio Grajales Yuca Y Ana Paula Ruvian”.
Agrega que posee grabaciones en video y audio, las cuales presentará una vez que se recupere completamente de la enfermedad.
Peor todavía y ya lo referimos arriba, el testimonio de la hija del fallecido va más a fondo, pues asegura que no está incurriendo en un acto de venganza ni de influyentismo, si no denunciando a un médico que se pasó de listo. Las dos caras de la moneda…
LA FISCALÍA
La Fiscalía del Estado desde el día de la detención que, Vicente “N” incurrió en la posible comisión del delito de “abuso de autoridad en Tuxtla Gutiérrez”.
“… en su calidad de servidor público del área COVID del Hospital de Especialidades Vida Mejor, dependiente deIsstech, solicitó a la persona denunciante equipo e insumos para tratar a su padre…”, indicó la FGE.
Volvemos al principio. No es un caso sencillo: están los familiares del fallecido que exigen justicia y los familiares que alegan inocencia del médico. ¿Usted qué opina? Las dos caras de la moneda…