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03 de mayo del 2020.- Después de 55 días de confinamiento, Italia encara su ansiada «Fase 2», la de la desescalada, con unas cifras halagüeñas en cuanto al control de la emergencia sanitaria por la Covid-19. A pesar de tener que lamentar 174 nuevas muertes en las últimas 24 horas, y un balance de 28.884 muertes desde que irrumpió la pandemia, se trata de la cifra de fallecidos más baja desde que empezó la cuarentena en el país mediterráneo, el pasado 9 de marzo.
Sobre todo, aunque es un número de muertes similar a la de aquellos días, llega cuando se ha dejado atrás la curva ascendente de casos y decesos y una larga «meseta» hasta doblegar la funesta tendencia de la pandemia en el país europeo actualmente con más fallecimientos y el segundo con más casos, por detrás de España.
Del mismo modo, se ha producido un nuevo descenso en los casos actualmente positivos, que son 100.179 (525 menos que el día anterior). En total, Italia acumula 210.717 casos de Covid-19, entre activos, fallecidos y recuperados, desde que se produjo el primer contagio local el pasado 21 de febrero (solo 1.300 nuevos, frente a los 1.900 del día anterior).
Hasta la fecha han superado la enfermedad 81.654 personas, 1.740 de ellas en las últimas 24 horas. El 81% de los positivos actuales, 81.436 personas, están en aislamiento domiciliario, y siguen reduciéndose las personas hospitalizadas, que son 17.242 en todo el país, y 1.501 están ingresadas en cuidados intensivos (38 menos que el sábado).
Temor por la vuelta a la actividad de las regiones más afectadas
Italia empieza el lunes su Fase 2, que trae consigo la reincorporación a la actividad productiva de 4,5 millones de trabajadores, de los cuales el 80% pertenece a las tres regiones más afectadas por el virus: Lombardia, Piamonte y Emilia-Romaña, al norte del país, lo que hace temer un repunte de contagios.
Lombardía, la región más afectada, registra más de 77.500 casos totales y 14.231 fallecidos -casi la mitad de los de todo el país, pero el ritmo también se está reduciendo y el último día los muertos fueron 42. Le siguen Piemonte y Emilia Romaña, con 27.430 y 26.016 casos, respectivamente.
El confinamiento se mantiene pero se relaja un poco. Se toman medidas de alivio, como la reapertura de los parques y los italianos podrán salir a la calle en determinadas circunstancias, y se podrá visitar a familiares cercanos, pero no hacer reuniones sociales.Pero seguirá prohibido salir de los domicilios a pasear, si no es por razones justificadas de salud o necesidad, aunque se permitirá hacer deporte, y sigue prohibido viajar a las segundas residencias.
Las mascarillas serán obligatorias solo en lugares cerrados, aunque algunas regiones las han declarado obligatorias en cualquier circunstancia, como Lombardía. En cualquier caso, el Gobierno italiano ha garantizado un precio máximo para las mascarillas de 0,5 euros por unidad.
Las autoridades italianas también han informado de que a partir del lunes llegarán los test serológicos a muchos laboratorios seleccionados por el Ministerio de Sanidad para iniciar el estudio de muestra de anticuerpos a los primeros 150.000 ciudadanos.
Conte: «La desescalada no es liberar a todos»
Ante todo, el Ejecutivo recuerda que todo sigue dependiendo de la responsabilidad individual de cada uno para protegerse y proteger. El primer ministro, Giuseppe Conte, volvió a llamar a la prudencia y ha recordado que la llamada Fase 2 no significa «liberar a todos».
«Estamos entrando en la Fase 2 de la emergencia, gracias al poderoso esfuerzo colectivo. Esta nueva fase nos ha costado enormes sacrificios y por eso no puede entenderse como un ‘liberar a todos'», ha señalado en una entrevista publicada en el diario La Stampa.
El jefe de Gobierno ha pedido evitar «gestos descuidados o, peor aún, un trabajo colectivo de eliminación» de las medidas. «El virus continúa circulando entre nosotros, todavía estamos en plena pandemia», subrayó.
Con información de RTVE de España
