21 de diciembre del 2019.- El Gobierno y la oposición del Comité Constitucional de Siria permanece dividido sobre su agenda por lo que las negociaciones se encuentran estancadas. Mientras tanto, el Consejo de Seguridad falla en ponerse de acuerdo para pasar una resolución que garantice la entrega de ayuda humanitaria en las fronteras del noroeste del país el próximo año.
La segunda sesión del Comité Constitucional sirio, que tenía el objetivo de crear una nueva hoja de ruta política de posguerra para el país, no pudo despegar debido a la falta de consenso sobre la agenda, aseguró este viernes ante el Consejo de Seguridad el enviado especial de la ONU para el país.
Sin embargo, Geir Pedersen dijo a los embajadores que hay lecciones que aprender de la reunión del llamado órgano menor del Comité, celebrada en Ginebra a fines de noviembre.
“La última vez que informé a este Consejo, acabábamos de concluir una exitosa sesión de apertura del Comité Constitucional. Esta segunda sesión fue obviamente muy diferente en sustancia y tono, pero el desacuerdo en la agenda es típico de cualquier proceso político”, señaló.
Esperanza de acuerdo
Si bien el Comité completo está compuesto por alrededor de 150 personas, el órgano menor está compuesto por 45 representantes del Gobierno sirio, la oposición y la sociedad civil, que se reunieron inicialmente en Ginebra en octubre.
Pedersen había pedido a los dos copresidentes que presentaran sus propuestas de agenda antes de la segunda sesión, que comenzó el 25 de noviembre.
El plan de trabajo de la oposición, enviado el 21 de noviembre, presentaba diez títulos constitucionales y se centraba en el preámbulo de la constitución, así como en los principios básicos.
El 25 de noviembre, el Gobierno propuso una agenda que pedía la discusión de los «pilares nacionales» que preocupan al pueblo sirio, diciendo que las cuestiones constitucionales se abordarían después.
El enviado del Secretario General trabajó para facilitar el consenso entre las partes, pero no fue posible.
“Espero que se pueda llegar rápidamente a un acuerdo sobre una agenda que se ajuste a los Términos de Referencia y las Reglas de Procedimiento Básicas del Comité Constitucional. Tal como están las cosas, y en ausencia de una agenda acordada, no veo ninguna razón para convocar otra sesión del órgano menor”, apuntó.
ONU/Violaine MartinGeir O. Pedersen en una reunión con algunos miembros del Comité Constitucional de Siria.
Condiciones previas no permitidas
El enviado de la ONU describió al Comité Constitucional como «frágil» y afirmó que para que haya progreso, las partes deberán permitir que sus miembros trabajen profesionalmente en los temas constitucionales.
Además, cualquier agenda propuesta debe cumplir con los Términos de Referencia y las Reglas básicas de procedimiento, que las partes han acordado.
«Esto significa que todos los temas están abiertos a discusión dentro del Comité, sin condiciones previas y sin hacer que un tema dependa de la resolución de otro«, explicó. «Y también significa que las cuestiones deben enmarcarse y caer bajo un título constitucional», agregó.
Pedersen sostuvo que lo que sucedió en la segunda sesión solo subraya la necesidad de un proceso político más amplio e integral para Siria, que se ha visto envuelta en un brutal conflicto civil desde 2011.
“Si bien considero que un Comité Constitucional no puede resolver la crisis, puede ayudar a fomentar la confianza entre las partes, y eso puede abrir la puerta a un proceso más amplio que impactaría positivamente en el trabajo sobre las cuestiones constitucionales”, concluyó.
ONU/Eskinder DebebeEl Consejo de Seguridad durante la votación sobre la ayuda humanitaria transfronteriza en Siria.
El Consejo también está dividido
Por otro lado, el Consejo de Seguridad de la ONU falló en aprobar dos proyectos de resolución competitivos destinados a autorizar las entregas transfronterizas de asistencia humanitaria en Siria desde Turquía y Jordania.
El primer proyecto de resolución fue propuesto por Alemania, Bélgica y Kuwait y recibió 13 votos a favor, pero fue vetado por Rusia y China. El borrador habría reautorizado el uso de tres de los cuatro cruces fronterizos actualmente obligatorios para operaciones humanitarias transfronterizas.
El segundo texto propuesto por Rusia tampoco fue aprobado ya que no recibió suficientes votos a favor. El proyecto recibió el apoyo de Rusia, China, Sudáfrica, Guinea Ecuatorial y Costa de Marfil, pero tuvo seis votos en contra de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Bélgica, Polonia y Perú. Hubo cuatro abstenciones: Alemania, Kuwait, Indonesia y la República Dominicana.
Antes de la votación, el embajador ruso Vassily Nebenzia dijo que su delegación votaría en contra del borrador de de Alemania, Bélgica y Kuwait, ya que según él no refleja los cambios que ocurrieron en el terreno desde 2014. Dijo además que las operaciones transfronterizas fueron diseñadas para uso temporal, y agregó que el Gobierno había restablecido su control sobre gran parte del territorio sirio. También hizo hincapié en la necesidad de revisar los parámetros de entrega de ayuda humanitaria en el país, y resaltó que se debe tener en cuenta la posición del Gobierno, que rechaza el mecanismo tal como está.
El embajador ruso dijo que el borrador propuesto por su país se basó en consideraciones puramente humanitarias y mantiene las operaciones transfronterizas en el lugar donde se necesitan.
“Nuestro documento extiende específicamente el mecanismo transfronterizo. Anteriormente nos abstuvimos de apoyarlo [el mecanismo], pero no lo bloqueamos dadas las necesidades humanitarias de Siria, lo cual reconocemos. Este año estamos listos para apoyarlo. Esto proporciona acceso a asistencia humanitaria en el noroeste de Siria, donde dicha asistencia sigue siendo necesaria. Hemos dado nuestro paso para satisfacer las preocupaciones de los colegas y darles cabida. Los otros textos siguen teniendo disposiciones que están divorciadas de la realidad. Este no es un enfoque honesto en nuestra opinión «, expresó.
La embajadora de los Estados Unidos, Kelly Craft, dijo que estaba sorprendida por el resultado luego de la votación del primer texto.
«Las consecuencias de los vetos de Rusia y de China de esta resolución del Consejo de Seguridad serán desastrosas. Esta decisión es imprudente, irresponsable y cruel. En este momento, cuatro millones de personas en Siria dependen del mecanismo de asistencia transfronteriza de la ONU para medicinas, refugio y alimentos. No hay justificación imaginable para ningún miembro de este Consejo que deje a los civiles sirios vulnerables con menos medios para obtener ayuda vital», aseguró.
En declaraciones a los periodistas después de la reunión, el embajador alemán Christoph Heusgen dijo que el Consejo de Seguridad ha «fallado» hoy a más de cuatro millones de personas que necesitan asistencia transfronteriza en Siria. Añadió: «Este es un día triste para el pueblo sirio».
Hablando en nombre de los coautores de la resolución, Kuwait y Bélgica, Heusgen dijo que durante semanas habían llevado a cabo negociaciones exhaustivas y transparentes para lograr una propuesta equilibrada. También hizo hincapié en que el borrador que propusieron se basó en las necesidades humanitarias en el terreno y no en consideraciones políticas. El embajador alemán subrayó que los tres países continuarán trabajando para este fin y pidió a todos los miembros del Consejo de Seguridad que cumplan con su responsabilidad y tomen medidas.