Columna Política «Ensalada de Grillos», Por Ciro Castillo (11-XI-19).- Y otra vez estamos metidos en una “guerrita” de redes sociales, entre quienes siguen al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y los que están en contra.
Todo comenzó la semana pasada por el seguimiento al caso Culiacán y la posterior confrontación entre AMLO y cierto sector de la prensa mexicana.
Esta “confrontación” vía Twitter se avivó un poco más el último día de octubre y el fin de semana, cuando el Presidente de México soltó en la red social “del pajarito” el tema Golpe de Estado.
En la mañanera del lunes, la cosa tomó mayor “color de hormiga” porque, apoyado en un funcionario de la Secretaría de Seguridad Pública, el Presidente expresó que los ataques han sido orquestados mediante grupos opositores que utilizan “bots”.
Lo más curioso es que, de acuerdo con el mismo funcionario de Seguridad, la mayoría de los tuits que se intercambiaron se generaron en la Ciudad de México, Nuevo León, Sinaloa y Jalisco, mientras que el resto del país estaba en lo suyo: en el puente y en la celebración del Día de Muertos.
Entonces, de qué nos sirve enfrascarnos en una guerra sin sentido entre “amlistas” y opositores, entre “fifís” y “chairos”, entre “granjas de bots” que, seguramente existen, pero no representan la voz de todos los millones de mexicanos que votaron o que no votaron por el gobierno en turno. Pero qué necesidad…
¿GOLPE DE ESTADO?
El fin de semana, estando en Palenque, Chiapas, Andrés Manuel López Obrador soltó el tema de la posibilidad de un Golpe de Estado en México.
Con algunos “tuits” pareció decir que en el país existen las condiciones para que se pueda derrocar al gobierno que llegó al poder legítimamente.
“Qué equivocados están los conservadores y sus halcones!
Pudieron cometer la felonía de derrocar y asesinar a Madero porque este hombre bueno, Apóstol de la Democracia, no supo, o las circunstancias no se lo permitieron, apoyarse en una base social que lo protegiera y respaldara”, escribió Obrador y puso a temblar a más de uno.
¿Qué sabe el Presidente que los demás no sepamos? ¿Quiénes estarían detrás de un eventual Golpe de Estado? ¿Está tratando de desviar la atención por las críticas en su contra? Muchas fueron las preguntas que surgieron.
En la mañanera del lunes, una vez pasada la efervescencia del Día de Muertos, el Presidente tuvo que aclarar lo que había intentado decir con ese tuit “mortuorio”.
“Al pan, pan; al vino, vino. Cuentas claras y chocolate espeso. Nada de indefiniciones, en política la indefinición suele ser funesta, hay que tener mucha claridad”, indicó AMLO.
“…por eso lo de mi mensaje, para que nadie esté pensando que hay condiciones para dar un golpe de Estado; no existen condiciones, eso es lo que digo, no hay esas condiciones, para que no se caiga en esa tentación”, expresó tratando de aclarar sus dichos.
“Y surge esto también porque la declaración del general es imprudente. Tiene todo su derecho a expresarse, a manifestarse, pero si leen ustedes el texto hay una actitud poco mesurada”, agregó, regresando a la declaración de un general en retiro, quien la semana pasada había mostrado cierto descontento con la forma en que se gobierna en la Cuarta Transformación.
Carlos Gaytán Ochoa, en un desayuno con generales en activo y en retiro, unos 500, había expresado que los militares fueron formados en ciertos principios que son contrarios a las políticas que aplica el gobierno emanado de Morena.
Las expresiones del Presidente de México el fin de semana, vía Twitter, parecieron contestar al general en retiro y a quienes están en contra de su gobierno, pero de ahí a que haya condiciones de un Golpe de Estado, no estamos de acuerdo.
Insistimos, pero qué necesidad de polarizar más a una sociedad evidentemente dividida.
Claro que el nuevo gobierno, con sus políticas, con su forma de hacer las cosas, con sus programas, ha pisado “cayos”, pero de ahí a que se esté tramando la caída de un gobierno que apenas lleva un año, estamos muy lejos. Pero qué necesidad…