Columna Política «Ensalada de Grillos», Por Ciro Castillo (29-VIII-19).- Este miércoles México entero conoció una noticia horrorosa. Ni cualquier narcoserie de esas que están de moda en la televisión abierta y de paga, podrían imaginarse una situación como la ocurrida en un “table dance” de Coatzacoalcos, Veracruz.
A tres días del primer informe presidencial de Andrés Manuel López Obrador, un bar fue incendiado por una supuesta venganza entre integrantes del crimen organizado.
Hasta el medio día de este miércoles iban 27 muertos contabilizados y aún había gente hospitalizada con quemaduras en el 90 por ciento del cuerpo, con un pronóstico reservado.
Los “malosos” llegaron al lugar y por la fuerza cerraron las entradas y salidas para luego incendiar el bar conocido como “Caballo Blanco”, ubicado en una zona muy concurrida del puerto veracruzano.
Ni la presencia de la Guardia Nacional en esa y otras zonas del país han logrado disminuir las cifras de la delincuencia que, sin recurrir a las cifras, parece que ya están por arriba del sexenio pasado.
Ya lo preguntamos antes, pero volvemos a insistir, si esta nueva corporación que fue creada para tratar de apaciguar los niveles de inseguridad que se vienen arrastrando de unos tres sexenios atrás, no funciona, y si no hay los resultados esperados, qué sigue. Caballo blanco…
SOBRE ADVERTENCIA NO HAY ENGAÑO
El Presidente de México reaccionó a los hechos de Coatzacoalcos, Veracruz, y advirtió que no solamente se investigará a los autores materiales e intelectuales de la masacre, donde murieron incluso más que los de El Paso, Texas, cuando todos nos “rasgamos las vestiduras”.
Dijo, aparentemente con datos que le fueron proporcionados en la reunión de seguridad de la seis de la mañana, que al menos uno de los que realizaron el ataque en el bar Caballo Blanco ya había estado detenido y fue liberado.
A pesar de que la Fiscalía General de Veracruz negó tal señalamiento y expresó que, al contrario, fue la Fiscalía General de la República quien lo dejó en libertad, la advertencia de AMLO parece que va en serio.
Las declaraciones del Presidente de México fueron una especie de espaldarazo y “purificación” para el gobernador de Morena, Cuitláhuac García, quien tiene serias diferencias con el fiscal de Veracruz, Jorge Winkcler, quien es herencia del gobierno de Miguel Ángel Yunes.
OBRADOR AMENAZA A MORENA
En medio del violento caso de Coatzacoalcos, Veracruz, una zona que desde hace varios años es tierra de nadie, el Presidente de México lanzó una advertencia para los que dirigen y para quienes forman parte del Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Dijo que si el partido se “echa a perder”, él estaría dispuesto a renunciar a Morena, el movimiento que él mismo conformó desde 2011 y obtuvo registro en 2014.
Fue más allá. Advirtió que sigue el movimiento incurre en actos de corrupción como los que él mismo ha criticado, exigiría que le cambien de nombre.
El mensaje debe ser tomado muy en serio por quienes dirigen a Morena, partido que está próximo a nombrar a su nueva dirigencia nacional.
La señora Yeidckol Polevnsky debe poner sus “barbas” a remojar después de tan tremenda advertencia lanzada, nada más y nada menos, que por el Presidente de México y fundador de Morena.
ERA, PENDIENTE DEL TERRUÑO
El senador chiapaneco, Eduardo Ramírez Aguilar, a pesar de que se mueve como pez en el agua en el Senado de la República, no se olvida del terruño: de Chiapas y de su Comitán.
Desde la Cámara Alta lanzó un llamado enérgico para evitar el cierre del Tribunal Unitario Agrario con sede en la ciudad de Comitán, pues, dijo, resultarían afectados ejidatarios, comuneros y sus familias.
Se pretende, alertó el legislador chiapaneco, cerrar las sedes de: Comitán, en Chiapas; Iguala, en Guerrero y Culiacán, en Sinaloa, de un total de 56 Tribunales Agrarios.
El senador, fiel a sus raíces y al terruño, dijo que pobladores tojolabales, lacandones y tsotsiles saldrían afectados en caso de que esta medida anunciada fuera realidad.
“… los tribunales agrarios atienden a los habitantes del campo, que se encuentran en un bajo índice de desarrollo humano y que viven en condiciones de pobreza…”, dijo ERA.