Faltan voces fuertes

Por Víctor Ardura.-  Es extraño el comportamiento de la sociedad cuando de una opinión se trata, en especial cuando se trata del tema de las drogas. Las opiniones van desde las más conservadoras hasta las abiertas con declaraciones de ser usuarios. Nada nuevo.

Lo que llama nuestra atención es que a pesar de que Estados Unidos ha comenzado una nueva cruzada contra las drogas al visualizar el problema desde el punto de vista de la salud, como todo primer mundo que se respete, en nuestro país las disposiciones políticas y legales dependen mucho del criterio de la ciudadanía y ésta no es alentadora.

Para fines prácticos en materia de la tendencia de la población sobre la legalización de las drogas, los porcentajes planteados por Parametría son ilustradores. Del 2008 en el que únicamente un pobre 7% de los mexicanos votaba a favor de la legalización de la mariguana.

La tendencia se incrementó para el siguiente año en el que se registra un 17% en el primer trimestre. Ya para el 2010 sube y llega hasta 26% en agosto. Todo señaló que los mexicanos abrían su criterio moral hacia la salud antes que cualquier otro prejuicio.

Sin embargo, este agosto pasado, caímos hasta el 19 por ciento a favor. Tremendo viraje en la opinión. Importante saber ahora cuál es el discurso de este sentimiento conservador en el que es preferible que la venta de cannabis siga clandestina.

Si bien la curva va en descenso en materia de siquiera discusión en las diferentes cámaras del legislativo sobre la legalización de las drogas, existe buena parte de la población que sin ser encuestados exigen igualdad también en esta área de la voluntad humana.

Sólo que a pesar de que se escuchan, no se ven las concentraciones humanas, de mexicanos concretamente de los que se asumen como ciudadanos con derecho a elegir qué se introduce a su cuerpo y en qué condiciones lo haría. Falta, por supuesto, sus voces claras y fuertes. Yo nada más digo.