Jefe de la Guardia Nacional, Michoacano

En nuestras últimas entregas, hemos denunciado la cadena de corrupción que corroe al Hospital de Especialidades del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, el ISSSTE que se ubica en esta ciudad de Morelia Michoacán y que hasta la fecha ¿Dirige? El Doctor RICARDO PONCE REYES y que cada día que transcurre, fallecen los pacientes por evidentes fallas médicas.

Las denuncias que en este medio de comunicación hemos hechos, se refieren en concreto a la actuación perversa y corrupta del departamento de traumatología, particularmente en lo que se refiere a cirugías con implantes de prótesis, de muy mala calidad pero que se adquieren a la empresa en donde el hijo del director PONCE es agente vendedor y bien, inducen a los pacientes a comprar en la vía privada las respectivas prótesis, bajo el argumento de que las que otorga el instituto son de muy mala calidad.

Así las cosas, para desgracia de la derechohabiencia, el pasado miércoles 10 de abril, falleció la paciente de nombre MARÍA OFELIA H. C., la que se encontraba en la cama 53 del citado Hospital de Especialidades, la que al ser sometida a un procedimiento quirúrgico producto de una fractura de cadera, falleció en las manos del médico cirujano traumatólogo JOSÉ PADILLA CUEVAS.

EMPRESAS “PREFERIDAS” INFIERE CORRUPCIÓN.

En el padrón de proveedores del instituto, existen una serie de proveedores en todas las ramas de los insumos que adquiere el ISSSTE, proveedores que participan y han participado en las licitaciones respectivas, sin embargo, de manera muy “sospechosa” el director de la institución permite que su hijo RICARDO PONCE JR. Comercialice productos de una empresa que representa comercialmente, particularmente en el área de “Osteosíntesis”, empresa que por cierto, no ha ganado una sola de las licitaciones, sin embargo, PONCE REYES promueve que se le compren los insumos a la empresa que representa su hijo.

GOMAR S.A. es el nombre de la empresa que representa el hijo del director RICARDO PONCE REYES, a la que se le compran la gran mayoría de insumos, incluyendo los quirúrgicos como prótesis, a pesar de que no ha ganado ninguna licitación por la mala calidad de sus productos, sin embargo, por los pantalones del señor director PONCE REYES, se le compran los productos a su hijo de nombre RICARDO PONCE JR.

Solo para que usted estimado lector se dé una idea del mercado irregular de insumos médicos para la osteosíntesis o para prótesis de cadera, que el director del hospital a procreado con su hijo, los siguientes derechohabientes fueron sometidos a procedimientos quirúgicos con insumos procedentes de la empresa GIOMAR S.A. que promociona el hijo del director:

1.- MARÍA DELFINA A.F., operada con material de Giomar sábado 06 de abril

2.- ADELINA P. A., operada con material de Giomar lunes 08 de abril

3.- Arturo S. C. el mismo día 08

4.- JOSEFINA Z. Z. igual el día 08.

5.- Como ya se apuntó, la señora MARÍA OFELIA H. C., operada el pasado 10 de abril, falleciendo a consecuencia de la cirugía de cadera.

En la fotografía anterior, podemos observar al doctor RICARDO PONCE JR., (de bata blanca) hijo del director del Hospital de Especialidades RICARDO PONCE REYES, en pleno ejercicio comercial, al extremo que, en esa zona del propio hospital, de manera indebida se almacenan insumos de la empresa GOMAR S.A. que representa comercialmente PONCE JR. para su rápida entrega.

LA HISTORIA DE IRMA H.A.

En efecto, la señora IRMA H.A. sufrió una fractura de cadera en el año 2013 y mediante una intervención quirúrgica se le implantó una prótesis la que a finales del año 2017 empezó a dar problemas de movilidad y de intensos dolores por lo quen acudió al Hospital de Alta especialidad del ISSSTE en esta ciudad capital a solicitar servicio médico en su calidad de derechohabiente.

Así las cosas, fue canalizada a departamento de traumatología en donde se le señalaron fechas para consulta con el espaciamiento correspondiente a un servicio malo, siendo atendida en consulta de especialidad por un médico de apellido ARIZMENDI, quién convenció a la paciente de ser atendida en la medicina privada, porque el “instituto” le daba las citas para consulta mues espaciada y ella necesitaba atención urgente.

Así las cosas, la paciente IRMA H. A. fue atendida por el médico ARIZMENDI en su consultorio particular y pocas veces en el consultorio del instituto, sin embargo, en una de esas ocasiones, el médico ARIZMENDI advirtió a la paciente de la necesidad de ser operada para quitarle la prótesis que traía y ponerle otra, solo que él no era el cirujano adecuado para su cirugía.

UN AÑO DE PEREGRINAJE SIN ATENCIÓN MÉDICA.

Transcurrió casi todo el año del 2018, en que los médicos del ISSSTE argumentaron que no era posible realizar la cirugía de cadera, pues la institución carecía del dinero necesario para financiar el costo de su cirugía y es allí donde aparece el DR. JOSÉ PADILLA CUEVAS, quien señaló a la paciente que, el doctor ARIZMENDI no era especialista en cadera y que sería él el médico tratante para la práctica de la cirugía.

A lo largo de ese 2018, el médico especialista PADILLA CUEVAS, fue insistente en la imposibilidad de que el instituto aportara la prótesis y que era ya urgente implantársela, de ahí que convenció a la paciente y a sus familiares de adquirir en la vía privada la citada prótesis, con un proveedor que él recomendó, la que le fue implantada el pasado 29 de enero del 2019, pagando un costo de $91, 700.00

Lo asentado en la presente investigación periodística, está narrado en gran parte en la queja que los familiares de la derechohabiente IRMA H.A. presentaron ante el director general del ISSSTE LUIS ANTONIO RAMÍREZ PINEDA y en la oficina del Lic. SILVERIO TAPIA HERNÁNDEZ, titular del órgano interno de control del instituto, esperando las consecuencias correspondientes.

RESULTÓ INFECTADA, NUEVA CIRUGÍA.

IRMA H. A. fue dada de alta el 31 de enero del 2019, solo que la herida de la cirugía practicada no cerraba, de ahí que se presentó en el hospital de especialidades el 12 de febrero del este 2019 a solicitar servicio de urgencia, pues presentaba un cuadro de alta temperatura, dolor y secreción de liquido purulento, por lo que fue internada en la cama 94 de dicho nosocomio.

Internada como ya se dijo, en la cama 94 del Hospital de Alta especialidad del ISSSTE en esta ciudad capital, durante casi 30 días estuvo en “estudios” para estar en condiciones de diagnosticar que la herida hecha en su pierna por la cirugía practicada, estaba gravemente infectada y se necesitaba practicar una nueva cirugía a efecto de extraerle la prótesis de 91 mil pesos que compró al médico PADILLA CUEVAS, la que se realizó la primera semana de abril.

En este momento, hay que puntualizar que el médico especialista PADILLA CUEVAS no ha podido “obligar” al proveedor que él recomendó, a que entregue el recibo o factura del importe pagado por la prótesis, de igual manera, hay que señalar que PADILLA CUEVAS se ha negado sistemáticamente a regresar la prótesis extraída a la paciente IRMA H.A. que como ya se dijo, costó la cantidad de 91 700.00 pesos, como también la dirección del hospital, se ha negado sistemáticamente a entregar a la familia de la paciente el “resumen clínico” que corresponde a la atención prestada.

POR NEGLIGENCIA, A LA MEDICINA PRIVADA.

Como ya se anotó, la paciente IRMA H. A. fue dada de alta DEL Hospital de Alta Especialidad del ISSSTE la semana próxima pasada, empero, el cuadro clínico de las altas temperaturas y el proceso infecciosos de su cadera en donde se le practicó la última cirugía por parte del médico PADILLA CUEVAS, no ha desaparecido, por el contrario, se ha empeorado, de manera que los familiares han tomado la determinación de internar a la paciente en una clínica particular.

LA REFLEXIÓN.

Este escribidor se pregunta, qué debe de suceder en relación a la atención de los pacientes en el Hospital de Alta Especialidad del ISSSTE en Michoacán, para que las autoridades correspondientes pongan atención y realicen lo necesario para corregir el torrente de irregularidades, por lo menos las aquí demostradas y probadas.

Cuantos pacientes y derechohabientes del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado en Michoacán deben de morir para que el dirigente de los burócratas en el estado AURELIO CHÁVEZ HERRERA ponga atención en lo que sucede en dicho hospital. ¿Con cuantos muertos el delegado del gobierno federal ROBERTO PANTOJA ARZOLA pondrá atención a lo que sucede en este nosocomio?

Lo curioso del asunto es que los hoy denunciados, en lugar de preocuparse por enderezar el entuerto que tiene en dicho hospital, se reúnen con frecuencia a efecto de diseñar la estrategia jurídica, para demandar a este escribidor “por daño moral” y los que resulten. Cuanta vergüenza les ha sido injuriada, sobre todo, su honor como personas y como profesionales de la medicina, de tal suerte que el escribidor denunciante, debe ser llevado al cadalso. Qué sea lo que dios quiera.

JEFE DE LA GUARDIA NACIONAL, MICHOACANO.

Oriundo de la comunidad de Condembaro, municipio de Tancítaro Michoacán, el general LUIS RODRÍGUEZ BUCIO, fue designado por el presidente de la república ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR como el coordinador o jefe de la Guardia Nacional. Según su curricula, RODRIGUEZ BUCIO tiene los suficientes méritos para dirigir tan importante institución de seguridad.

De la misma generación del presidente del CDE del PRI en Michoacán VICTOR MANUEL SILVA TEJEDA, ambos nacidos en el año de 1956 y del mismo municipio, se ha conocido de una vieja amistad entre el militar y el político priista, amistad que nace en la infancia de ambos tancitarenses.