*ESTANCIAS INFANTILES, ERROR DESPARECERLAS.
*ESTANCIAS SIN CONTROL DEL ESTADO.
*22 CENDIS EN EL ESTADO, INTOCABLES.
*LOS CENDIS DEL PT.
*“VOY AL PRI”, HASTA QUE LES CAYÓ EL VEINTE.
*LA GESTORÍA, CIMIENTO DE REENCUENTRO.
Columna «Bajo la Lupa», Por Armando Saavedra (11-II-19).- Desde el muy particular punto de vista de este escribidor, el programa de estancias infantiles ejecutado por la Secretaría de Desarrollo Social, es uno de los que creo, funcionaban y daban resultados, entre los creados por el antiguo régimen, que ahora, la cuarta transformación ha decretado su defunción, al proscribir el presupuesto destinado para su ejecución.
Y es que no se trata solo de la acción de “cuidar” a niños, el que un niño vaya a una estancia infantil patrocinada por la SEDESOL o como se llame ahora, consiste en atender el desarrollo integral de los pequeños, mediante acciones que promuevan el cuidado de su salud y de sus hábitos alimenticios, todo a través de programas educativos-formativos acoplados a su edad y desarrollo.
Lo anterior, como el primer y principal beneficio del programa, pero el segundo objetivo, es el de dar oportunidad a aquellos padres de familia que no gozan de beneficios de la seguridad social por no tener un empleo que le dé acceso al régimen obligatorio del IMSS o similares y puedan tener la oportunidad de dejar a sus hijos de 11 meses a 4 años de edad, al cuidado de profesionales capacitados para el resguardo, cuidado y educación de sus pequeños.
Pero, por otro lado, generar con las instancias infantiles, entre 15 y 20 mil empleos, responsables de cuidar y atender a un aproximado 400 mil niños, casi misma cantidad de padres viudos o divorciados o madres solteras, con la necesidad de trabajar y no tener con quien dejar a sus menores hijos, mientras estudian o trabajan.
Finalmente, estamos hablando de la desaparición de 3 mil pequeñas empresas que también son las estancias infantiles, pues el subsidio recibido por el estado, de ninguna manera es suficiente para su operación, como tampoco lo es su construcción, instalación y/o adaptación, cuya inversión oscila entre los 750 mil y un millón de pesos, inversión que quedará a la deriva o se perderá por falta de demanda.
Son los anteriores comentarios, lo que sirven de base para exhortar al gobierno de la república, a efecto de que se haga una profunda reflexión en este tema, pues sí se encontró que hay actos de corrupción en el manejo y operación de dicho programa, se corrija lo que haya que corregir, se impute la responsabilidad civil y/o penal a quien corresponda, pero que dicho programa se conserve en favor de cuando menos 400 mil mexicanos con esa necesidad.
ESTANCIAS SIN CONTROL DEL ESTADO.
A partir del cumplimiento de lo dispuesto por el señor presidente de la república, en el sentido de que se le entregue la “beca” a cada padre de familia para que éste decida a que guardería llevar a su hijo, es el momento en que el estado pierde el control sobre esas guarderías, las que ahora podrán relajar las reglas de operación para bajar costos y pues no estarán bajo el control del estado.
22 CENDIS EN EL ESTADO, INTOCABLES.
Usted tal vez no lo sepa, pero en el estado de Michoacán, existen 22 Centros de Desarrollo Infantil conocidos como CENDIS, que dependen de la Secretaría de Educación en el Estado, de los cuales 8 gozan de presupuesto federal y 14 dependen del presupuesto estatal, solo que tales centros, son de uso exclusivo de los trabajadores de la educación y por ser una prestación laboral, está prohibido el acceso a la sociedad en general.
Es claro que la federación no podrá meterse con el funcionamiento y financiamiento de estos centros de desarrollo infantil, pues reitero, son considerados como una prestación para los trabajadores de la educación, de ahí que son intocables y el estado o la federación no pueden afectarlos con medidas como a las estancias infantiles de SEDESOL o Secretaría del Bienestar.
LOS CENDIS DEL PT.
Por fin, pareciera que será el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR el que dará el puntillazo al uso político que de los Centros de Desarrollo Infantil ha hecho el Partido del Trabajo durante muchos años, pues el jefe del ejecutivo federal anunció, que al igual que las estancias infantiles de la SEDESOL, el presupuesto que la federación destina a los CENDIS que maneja el Partido del Trabajo, se entregará directamente a los padres de familia y ya no a los dirigentes de ese partido.
La relativa “privatización” de los CENDIS, tiene una vertiente positiva, pues evitará el uso clientelar de un partido político, pero también tiene una vertiente negativa, pues esas instituciones dejarán de tener el control del estado y aunque hay algo de ellos con prestigio hasta internacional, lo cierto será que la oferta y la demanda podría terminar con su calidad en el servicio.
“VOY AL PRI”, HASTA QUE LES CAYÓ EL VEINTE.
Es en serio, hasta que les cayó “el veinte” a los priistas, quienes al parecer ya se dieron cuenta que el camino del pleito y el diferendo, en nada les beneficiaría y, por el contrario, esa ruta solo los llevaría a la polarización y a la destrucción definitiva, que haría nulas las aspiraciones de reconstruirse para volver a ser competitivos en lo social y en consecuencia en lo electoral.
“Voy al PRI” me parece, es un programa interesante, cuya piedra angular será reencontrarse con la ciudadanía, a través de la prestación de servicios, cuya ejecución no tendrá en lo intrínseco costo económico, pues la legislación electoral lo prohíbe, el costo será el voluntarismo de sus militantes, quienes aportarán sus conocimientos y su tiempo en apoyo a quien se los demande.
LA GESTORÍA, CIMIENTO DE REENCUENTRO.
Dentro de este programa denominado “Voy al PRI”, está la arista de la gestión social, pues al no ser gobierno, los priistas y sus dirigentes solo tiene como alternativa la gestión social como único cimiento que les permitirá reencontrarse y proyectarse con su militancia y la ciudadanía en general, en un intento de demostrar que siguen siendo opción.
Este programa, será la oportunidad ideal para que los priistas demuestren de qué están hechos, si su lealtad al tricolor perdura o solo se trató de oportunismo político, en el que sus militantes solo estaban con él, en las maduras, cuando había que repartir, por que hoy, no hay nada, hoy es tiempo de regresarle, sobre todo, aquellos que recibieron y bien.
El éxito del programa “Voy al PRI” será fundamental, será el termómetro con el que se medirá cual será su potencial electoral, el que dependerá de la respuesta social a tal programa, de ahí que la participación de todos aquellos que recibieron algo, desde un empleo, un cargo de elección popular y similares, será fundamental, pero también se verá quienes son o no leales al tricolor, permitiendo este programa, que se dé una purga natural y se sepa con quién cuentan y con quién no, pues todo será voluntario.