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Pon Gerardo Espinosa
Desde que el PRI, en la persona de Fausto Vallejo, arribó al poder en febrero pasado, la Comisión Estatal de Derechos Humanos ha recibido más de dos mil 569 quejas, principalmente en contra de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE) y la Procuraduría General de Justicia (PGJE), por actos de autoritarismo, violación de derechos, represión e incluso hasta tortura.
Ante este escenario que se cierne sobre el estado en manos de priístas, el presidente del organismo, José María Cázares Solórzano, señaló que en este 2012, Michoacán es una de las entidades de mayor “convulsión social”.
El Ombudsman se pronunció porque los representantes tanto de la SEE como de la PJGE y todas las dependencias de gobierno, sean más sensibles a los requerimientos que les hace el organismo.
Asimismo, detalló que los casos «más graves» son el conflicto religioso en La Nueva Jerusalén, el caso de Cherán y Urapicho y, recientemente, la detención de estudiantes normalistas, el estado sobresale en la lucha contra los abusos de autoridad, atendiendo a sus facultades de ser observadora de la actuación del poder público, a fin de que estos se conduzcan en apego a la constitucionalidad y sin desvíos, buscando en todo momento la conciliación en los casos que la situación lo hace posible.
