Morelia, Mich., 27 de diciembre de 2017.- Durante 2017, han sido 16 mil 200 piezas vendidas en la tienda del Instituto del Artesano Michoacano (IAM), donde se ofrece una gran variedad de artesanía de todo el estado de gran calidad y en su mayoría, ganadora de los concursos artesanales. Esta cifra representa un 10 por ciento más que en 2016 y una derrama económica de 11 millones 893 mil 498.66 pesos.
Así lo informó el director general del IAM, Claudio Méndez Fernández, quien destacó que el objetivo del Departamento de Comercialización del Instituto es ubicar los diferentes productos artesanales en el mercado local, nacional e internacional, a un precio justo y que haga rentable el desarrollo de esta actividad. Para conseguirlo es necesario utilizar todos los mecanismos de promoción y difusión con que cuenta la dependencia, así como los externos que faciliten este objetivo.
Asimismo, resaltó que entre los diferentes puntos de venta que tiene el IAM, este año se logró un incremento del 40 por ciento de venta en la tienda en línea www.artesanias-michoacan.com, donde se ofertan productos de gran calidad elaborados con las técnicas tradicionales de cada región.
El titular de la dependencia estatal refirió que este año se lanzó el proyecto de la Villa Michoacana, un punto de venta móvil e itinerante, que viajará por diferentes ciudades de la República Mexicana y que cuenta con módulos, en los cuales las y los artesanos de la entidad venden de manera directa y sin intermediarios sus piezas, dándole el valor total de su precio para que se vea reflejado en la economía de sus familias y comunidades.
Méndez Fernández señaló que para el próximo año y con el objetivo de dar mayor impulso a la comercialización de la artesanía michoacana, se tiene la iniciativa de abrir un punto de venta en la Ciudad de México, cuya ubicación se definirá bajo una estrategia de mercado.
Agregó que en los diversos concursos que se desarrollan durante el año y visitas del personal del IAM a las diferentes comunidades, se realizaron compras
El IAM tiene la responsabilidad de emprender políticas públicas que atiendan al sector artesanal de manera integral; la comercialización representa el último eslabón de la cadena productiva, la cual comprende la obtención de materia prima, la elaboración de las piezas e innovación y, por último, la promoción y venta.