21 de junio, 2017 — Pese a un descenso del número de afectados por la hambruna en Sudán del Sur, gracias a una mayor respuesta humanitaria, el número de personas que encuentra dificultades para alimentarse a diario creció de 4,9 millones en febrero a 6 millones en la actualidad.
Un comunicado conjunto de varias agencias de la ONU advirtió hoy que esa cifra es el nivel más alto de inseguridad alimentaria jamás padecido en el país africano.
Además, indicaron que la situación alimentaria empeora en todo el país ya que cerca de 2 millones de personas sufren hambre a nivel de “emergencia”, el paso previo a la hambruna.
El director de Emergencias de la FAO, Dominique Burgeon, indicó que la crisis en Sudán del Sur no ha finalizado, que apenas pueden mantener a la gente viva y que la única manera de solucionar esta situación es ponerle fin al conflicto en el país africano.
El aumento de la inseguridad alimentaria se debe al conflicto armado, a una producción de las cosechas por debajo de la media y al alza de los precios de la comida, así como a los efectos provocados por la temporada de carestía.
Desde inicios de año, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) ha suministrado asistencia alimentaria de emergencia a más de 2,5 millones de desplazados y a 800.000 más a través de su iniciativa para fortalecer su resiliencia ante las crisis.