«Pipí, una obra para niños con complejo de meones» Monólogos a una sola voz

Morelia, Michoacán. 02 de agosto de 2012.- La etapa evolutiva del ser humano cuando se aprende a ir al baño sin asistencia de los padres, además, debe hacerse en medio de la noche y con miedo de enfrentarse a los monstruos de la oscuridad, es premisa de “Pipí, una obra para niños con complejo de meones”, encarnada por Susana Romo en el papel de Claudia.

Una niña que ya va a la escuela, pero que aún no controla su sistema renal  y a veces “le gana la chis”, continúa mojando la cama. Dentro de su fantasía, está consciente que debe hacer  todo lo posible para encontrar el antídoto y en el trayecto lucha contra la desatención de sus padres hacia ella debido a la  llegada  de un nuevo hermanito.

Planteamientos reales de las situaciones problemáticas que pasan los niños en esta edad, hace la actriz becaria del Programa Creadores Escénicos del FONCA en el periodo 2009-2010. Ante un público en su mayoría infantil -aunque también asistieron muchos adultos interesados en no perderse la cuarta función del Festival de Monólogos 2012-, se desarrolló la trama en la que la protagonista finalmente sale victoriosa.

Para enfrentar su miedo al “señor monstruo del cuento que no ha acabado de leer…” pasó por diversas situaciones divertidas que mantuvieron los ojos de chicos y grandes sobre el escenario. El uso de recursos teatrales como títeres para representar las figuras paterna y materna y, hasta a sí misma, en un intento por hacer efectiva la comunicación interpersonal, le permitió exponer diálogos divertidos, imitando las voces de los distintos personajes.

Llegó el momento en que con una caja de luz y técnicas del teatro de sombras, la pequeña relató “los sueños de Claudia”, dejando al descubierto todas sus confusiones  y su deseo de crecer, madurar emocionalmente y dejar atrás los días de humedad sobre las sábanas. Porque eso sí, “todos tenemos un húmedo y tibio pasado”, declaró.

Durante casi una hora de duración de la puesta en escena, charló también con una voz en off que representa al mencionado “monstruo” imaginario, baila, canta y se desplaza sobre tres diferentes espacios escénicos que evocan su recámara, el camino hacia la escuela y su salón de clases donde también comparte inquietudes con Clemente, su compañero de pupitre que también se hace pipí en la cama.

“Pipí, una obra para niños con complejo de meones” es original de Jaime Chabaud, dirigida por Fausto Ramírez y ejecutada por la compañía A la Deriva Teatro de Jalisco. El diseño de vestuario, iluminación y musicalización dirigida al público infantil le confieren un atractivo poderoso para atraer no sólo a niños y niñas de todas las edades,  sino a jóvenes y adultos a quienes hace recordar su infancia y las peripecias del proceso de aprendizaje para dejar de mojar la cama.

Este jueves en punto de las 20:30, y en el escenario sede, Foro La Bodega, Teatro a una sola Voz presentará su quinta y penúltima función con la obra de Samuel Beckett “Primer amor”, con la participación estelar de Emoé de la Parra.

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