Columna Política «ELQUENOCAE…», Por Leopoldo G. Arenas (07-02-17).- El 5 de febrero de 1917 fue una fecha histórica para nuestro país, en la ciudad de Querétaro un grupo de ilustres mexicanos dan vida a la que en su tiempo se convertiría en la Constitución de avanzada a nivel mundial.
Antes de esta fecha, las Constituciones de los diversos países, incluyendo Francia y Estados Unidos, eran documentos orgánicos, esto es, únicamente sistemas de organización del Estado en los cuales se plasmaba, el tipo de gobierno (central o federal) (parlamentario o presidencialista), cantidad de cámaras legislativas, estructura del poder, integración del sistema judicial etc.
En 1917 en México, surge un cambio de mentalidad, tomando como base la “Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano” emitida en Francia en 1789, se incorpora al documento básico de creación e integración de un Estado Nacional la parte Dogmática, por primera ocasión en la historia, se elevan a rango constitucional los derechos básicos del ciudadano.
Catalogados en Derechos de Libertad, Igualdad, Propiedad y también por primera vez de Seguridad Social, la Constitución Mexicana los incorpora como Derechos Humanos Fundamentales y se convierte en un instrumento jurídico de avanzada.
De 1917 a 1936 el país permanece incendiado, después de 126 años de luchas internas por el poder, Plutarco Elías Calles y después Lázaro Cárdenas del Rio consolidan el Estado Mexicano, el primero creando las instituciones necesarias, el segundo aplicando el libro básico en defensa de las mismas y del país ante las amenazas surgidas del extranjero.
En sus primeros dieciséis años la Carta Magna solo sufrió 13 reformas, pero a partir de 1934 se inicia una espiral en la cual en 80 años se realizan 216 reformas adicionales, esto significa 2.7 reformas en promedio al año.
Cambios ilógicos muchos de ellos, diseñados por personas sin los conocimientos jurídicos básicos, implementando ideas absurdas que rompen con todo tipo de lógica y que finalmente, terminan cambiando el sentido que el constituyente plasmo.
Como ejemplo de lo anterior tenemos la reforma que implementa los Senadores de minoría y los plurinominales por regiones. Las personas que la diseñaron, olvidaron de manera garrafal los fundamentos de la Cámara de Senadores. A diferencia de los Diputados que son representantes de la población, los senadores representan a los Estados como miembros integrantes del Pacto Federal, no a la población, por eso son ilógicas las figura de primera minoría (como si el Estado no fuera un ente unitario y se pudiera fragmentar) y más la de representación por región.
En fin, realmente nuestros gobernantes piensan que la Constitución es una dama a la cual hay que violar con cada nueva e ilógica iniciativa.
Los constituyentes se estarán revolcando en sus tumbas al ver el mamotreto en que se convirtió lo que en una ocasión fue motivo de orgullo nacional.
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