Ante ello, el líder del Sol Azteca se sumó a las voces que sugieren que el Presidente de la República que cancele su visita pactada a Washington para finales de mes.
«Hemos escuchado de parte del presidente Trump que México saca ventaja del Tratado de Libre Comercio, de tal manera que obviamente con esa posición no nos espera una buena negociación, por lo tanto no hay condiciones en este momento de abrir ninguna renegociación», destacó.
El líder perredista subrayó que si Estados Unidos insiste en salirse del Tratado de Libre Comercio, «hay que tomarle la palabra, que lo haga, nos quedaremos bajo el amparo de la Organización Mundial de Comercio, más del 80 por ciento del comercio de hoy con Estados Unidos está amparado precisamente a partir de la OMS, de tal manera que, aunque esto implique tiempos complicados de corto plazo, significará la posibilidad de tener una mejor condición en el contexto de la relación bilateral en términos comerciales».
Indicó que el Gobierno federal debe asumir un papel de estadista, sim sujetarse a los caprichos de Trump y por ello debe abrir una gran convocatoria a todas las fuerzas políticas, todos los sectores del país para plantear una estrategia para delinear las acciones a seguir frente a las decisiones de Donald Trump.
«Debemos construir una agenda común para enfrentar este cambio de paradigma que implica el salirnos del Tratado de Libre Comercio por decisión unilateral de Estados Unidos, enfrentar un muro que implicará de nuestra parte el dejar la colaboración que hemos venido teniendo en temas de seguridad, en temas de combate al terrorismo que han sido más por beneficio de Estados Unidos que por beneficio de nuestro país y que hoy, frente a un gobierno hostil, ya no tienen mucha razón de seguirse.»
Enfatizó que el PRD propone instalar una mesa de crisis con todos los actores relevantes del más alto nivel, actores políticos, actores sociales, liderazgos económicos financieros, para definir la ruta que habrá de tomar México frente a este cambio de paradigma y frente a este discurso hostil que ha enarbolado el presidente Donald Trump.