Columna «Sendero Político», Por José Cruz Delgado (12-XI-16).- Se dice que cada quien tiene el gobierno que merece, y es verdad. Muchas veces un gobernante engaña a los ciudadanos y aún así siguen confiando en ellos con la esperanza de que ahora sí cumplan sus promesas.
Baltazar Gaona Sánchez, actual alcalde del municipio de Tarímbaro, Michoacán es el clásico cacique político, dueño de tierras y muchos negocios y voluntades. Con este nuevo mandato van tres veces que ha sido presidente municipal por el Partido de la Revolución Democrática y ahora por el Partido del Trabajo porque fue impugnada su candidatura y se la echaron abajo y decidió postularse por el PT, cuyo dirigente es Reginaldo Sandoval Flores, amo y señor en la entidad.
Sus tres administraciones anteriores fueron muy cuestionadas por sus propios gobernados. De acuerdo con el portal Tiempo, el tres veces alcalde de Tarímbaro, Baltazar Gaona Sánchez, es todo un personaje digno de una novela o película por sus incontables anécdotas, aquél que entre otras cosas se dormía en las sesiones de pleno cuando fue diputado local y como edil se excedía en sus atribuciones para dar concesiones de transporte público y a recolectores de basura para que operaran en Morelia.
Baltazar Gaona se ha consolidado como todo un cacique en su municipio, que incluso impone a sus sucesores, y ostenta en su historial una serie de señalamientos en su contra, unos muy graves y otros que ya forman parte del anecdotario político de Michoacán.
En 2007 solicitó licencia a su cargo como diputado local para contender por tercera vez por la alcaldía de Tarímbaro, una vez que ganó la elección regresó a cobrar como legislador los dos últimos meses de la 70 Legislatura. “Yo sé que no es ético, pero la ley no me lo prohíbe”, declaró ante los medios de comunicación.
Como presidente de la Comisión de Transporte en el Congreso del Estado, no entregó dictamen del tercer informe de gobierno de Lázaro Cárdenas Batel, irregularidad que nunca fue sancionada.
El 5 de febrero de 2011, siendo el alcalde en funciones, Gaona Sánchez fue inhabilitado por tres años para ocupar cargos públicos por la Auditoría Superior de Michoacán (ASM). La inhabilitación nunca fue efectiva, pues contó con el respaldo del entonces coordinador del PRD en Congreso del Estado, Raúl Morón Orozco, para que concluyera su periodo sin problemas.
Se pudo conocer que además de la inhabilitación al también ex diputado local perredista se le determinó la existencia de un crédito fiscal procedente de su gestión 2002-2004, por la cantidad de 4 millones 227 mil 9.68 pesos, de los cuales se le ordenó resarcir a la hacienda pública municipal de Tarímbaro la cantidad de 1 millón 928 mil 945.55 pesos.
Asimismo, se le condenó a cubrir una sanción económica que debería haber depositado a la cuenta del Fondo de Fortalecimiento por la cantidad de 16 mil 844 pesos, por ser responsable directo del daño al erario público municipal. Lo anterior, por una desatención al procedimiento, ya que no acudió a las diligencias a las que fue convocado desde el 14 de octubre de 2007 y hasta el 8 de octubre de 2008.
Ya en 2015, Baltazar Gaona pretendía imponerse una vez más como candidato del PRD a la alcaldía de Tarímbaro, pero la dirigencia estatal del PRD no lo respaldó, motivo por el que decidió emigrar y convertirse en candidato del PT al mismo cargo, ganando la elección convirtiéndose por cuarta ocasión en alcalde de Tarímbaro.
Gaona Sánchez cuenta con múltiples propiedades, cientos de hectáreas de tierra y una plaza de Toros en Cutzio. Es compadre de medio municipio y da monedas a los niños a su paso y otorga dádivas a mujeres y hombres mayores y se siente protector de los humildes y dice que su sueldo (100 mil pesos mensuales) lo reparte entre la gente sintiéndose una especie de Chucho el Roto. Todo es una farsa y una mentira
En su última campaña prometió hospitales, vivienda a gente humilde, arreglar las calles, mejorar la seguridad y condonar el pago del agua si lo llevaban al triunfo. Nada ha cumplido.
Al iniciar su administración, dejó sin empleo a 400 empleados de base con más de 20 años de antigüedad y empleó a la gente de su entera confianza como es el caso de su hijo Mario Gaona quien se encarga de la presidencia y que según la Ley Orgánica prohíbe al munícipe colocar a parientes o consanguíneos a cargos públicos en el municipio, como también es el caso de uno de sus sobrinos de nombre Rodolfo que funge como responsable del área jurídica del Comapat. Baltazar Gaona Sánchez no respeta las leyes.
Por si fuera poco, la inseguridad se ha desatado y se dice que la policía solapa a los delincuentes pues rara vez acude a los llamados de auxilio, pero el alcalde petista se hace de la vista gorda.
Y para rematar, a una de sus sobrinas de nombre Beatríz, que es pastora de una iglesia cristiana le otorgó un predio en la colonia Galaxia Tarímbaro que iba a ser destinado para área verde ocasionando el enojo de los vecinos.