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03 de abril del 2025.- La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, ha resaltado durante su viaje a Groenlandia que las fronteras son «inviolables» y que no es posible tomar otros países. Es la primera visita que Frederiksen hace a la isla, territorio autónomo dependiente de Dinamarca y codiciado por Estados Unidos.
«Uno no se puede anexionar otros países, ni siquiera con el argumento de la seguridad internacional», ha declarado la mandataria en rueda de prensa con el presidente groenlandés en funciones, Múte B. Egede, y Jens-Frederik Nielsen, ganador de las recientes elecciones legislativas y que le sucederá en el cargo en unos días.
Alabanzas a EE.UU, pero con un mensaje claro
Frederiksen ha calificado de «irreal» la situación vivida en las últimas semanas con Groenlandia por las declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, sobre «hacerse» con la isla y ha señalado que «la violenta tormenta sólo ha empezado».
La primera ministra danesa, que ha repetido parte de su mensaje en inglés, ha dado un discurso lleno de alabanzas hacia Estados Unidos, «guardián del mundo libre desde la Segunda Guerra Mundial», un «amigo» al que Dinamarca siempre ha «admirado» y que le ha «inspirado».
«Pero cuando exigís haceros con una parte del territorio del reino (de Dinamarca), cuando somos objeto de presiones y amenazas por nuestros aliados más próximos, ¿qué debemos creer del país que tantos años hemos admirado? Nos conocéis, sabéis cómo somos, sabéis que no nos rendimos», ha afirmado.
La seguridad de la isla, en el punto de mira
Frederiksen ha trasladado a Washington que Dinamarca y Groenlandia están listas si quiere aumentar su presencia en la isla o reforzar la seguridad, materia en la que ha admitido que todavía «hay mucho por hacer». La seguridad es la principal crítica de Estados Unidos, que asegura que la isla estaría mucho mejor protegida bajo su control.
Por su parte, Egede ha recordado que la colaboración entre Groenlandia y EE.UU. se remonta a 80 años atrás y ha agradecido la «protección» de las bases estadounidenses. El presidente groenlandés en funciones también ha mostrado su deseo de una mayor cooperación en el área comercial.
Además, tanto Frederiksen como Nielsen opinan que el diálogo es fundamental. La mandataria danesa ha hecho una llamada a mantener una conversación «de una forma respetuosa y ordenada» y Nielsen ha señalado en declaraciones que recoge el diario digital groenlandés Sermitsiaq que «el diálogo es el camino hacia adelante, pero también hay una gran inseguridad porque ahora no lo hay».
Los tres líderes, de acuerdo en reforzar relaciones
Los tres líderes se han mostrado de acuerdo en la necesidad de reforzar la relación entre Dinamarca y Groenlandia, una isla de menos de 57.000 habitantes en 2,2 millones de kilómetros cuadrados y que cuenta con el 80% de su superficie cubierta por hielo de forma permanente.
«Debido a las cosas que ocurren fuera del país, debemos estar juntos, también dentro de la Mancomunidad del Reino (que incluye además a las Islas Feroe) y en relación a nuestros aliados más estrechos», ha señalado Nielsen, según Sermitsiaq.
La comparecencia se ha celebrado a bordo de un barco de la Marina danesa, en el que los tres han recorrido antes durante varias horas el fiordo de Nuuk (capital), en la segunda jornada del viaje a la isla de Frederiksen.
Una visita polémica
El anuncio del viaje de Frederiksen a Groenlandia se produjo un día después de que Nielsen —cuyo partido, el liberal e independentista Demokraatit, ganó los comicios generales del pasado día 11— anunciase una coalición que agrupa a todo el independentismo moderado e incluye a cuatro de las cinco fuerzas con representación parlamentaria.
La visita ha causado polémica en la isla ártica. Dos de los partidos de la coalición de Gobierno criticaron el viaje de Frederiksen y argumentaron que este no debería de haberse producido hasta que el Parlamento se hubiese constituido formalmente (el próximo lunes 7 de abril)
La ministra groenlandesa de Exteriores, Vivian Motzfeldt, del partido Siumut, calificó la visita de «inapropiada». Pero Nielsen, en cambio, la vio «normal». El futuro presidente groenlandés opinó que lo mejor era que la reunión se produjese lo más rápido posible y señaló que esperaba un «dialogo constructivo sobre nuestra cooperación futura».
La visita de Frederiksen se produce después del controvertido viaje del vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, que visitó el pasado 27 de marzo la base aérea y espacial estadounidense de Pittufik, al noroeste de la isla, con su esposa.
El plan inicial era que Usha Vance viajase a Nuuk y a Sisimiut, para asistir a una popular carrera de trineos tirados por perros, pero las protestas de los Gobiernos groenlandés y danés por venir en medio de las negociaciones para formar un nuevo Ejecutivo provocaron un cambio de programa.
