05 de febrero del 2025.- El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, ha anunciado que su país seguirá los pasos de Estados Unidos y se retirará del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. En sus declaraciones, Saar ha señalado que el órgano «demoniza obsesivamente a la única democracia en Oriente Próximo», en alusión a Israel.
«Este organismo se ha centrado en atacar a un país democrático y propagar el antisemitismo, en lugar de promover los Derechos Humanos», ha denunciado Saar sus redes sociales, donde ha insistido en que el Consejo de Derechos Humanos «tradicionalmente ha protegido a los violadores» de los derechos fundamentales.
Así, Saar ha subrayado que el organismo ha llevado a cabo una «clara discriminación» contra Israel. En total, el país ha recibido más de un centenar de resoluciones condenatorias. Según datos del ministro, esto supone «más del 20% de todas las resoluciones aprobadas en la historia del Consejo».
«Israel no aceptará más esta discriminación», ha concluido el encargado de la diplomacia israelí, que subraya que el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha emitido más resoluciones contra su país que contra «Irán, Corea del Norte y Venezuela juntos».
Estados Unidos e Israel, en el punto de mira por el futuro de Gaza
El anuncio de Saar se produce después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmara varias órdenes ejecutivas para retirar al país del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y pusiera también punto final a la financiación de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA).
Poco después de firmar estos documentos, Trump recibió en la Casa Blanca al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien estará de visita en Estados Unidos hasta el fin de semana. En declaraciones ante la prensa, el mandatario estadounidense ha propuesto que su país tome el «control» y reconstruya la Franja tras «reasentar» permanentemente a su población palestina en otros países.
La propuesta va justamente en contra de la legalidad internacional y se suma a la incertidumbre sobre los siguientes pasos que tomarán ambos Gobiernos en la región tras retirarse del Consejo de Derechos Humanos.
El portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, ha advertido sobre el conflicto palestino cómo «si buscamos soluciones, no debemos empeorar los problemas», y que «es esencial evitar toda forma de limpieza étnica», según dijo hoy en su rueda de prensa diaria.
Las palabras de Guterres, un adelanto de las que pronunciará esta tarde ante el ‘Comité para el ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino’ de la ONU, son una respuesta indirecta al plan por sorpresa anunciado la víspera por el presidente estadounidense, Donald Trump, de que su país ocuparía la Franja de Gaza tras el traslado de casi dos millones de palestinos.
El tono estadounidense ha encendido las alarmas entre los expertos, que señalan que la política imperialista de Trump y la complicidad de Israel en Palestina puede alimentar acciones similares en Rusia con Ucrania y en China hacia Taiwán.