13 de septiembre del 2024.- El gobierno de Venezuela ha abierto una crisis diplomática con España y ha llamado a consultas a la embajadora venezolana en Madrid, Gladys Gutiérrez, al tiempo que ha citado al representante español en Caracas, Ramón Santos.
Santos ha sido citado al Ministerio de Exteriores, previsiblemente para recibir una protesta formal. Este tipo de gestos diplomáticos se consideran una señal de que las relaciones entre dos países se están deteriorando, y podría ser un paso previo a la ruptura.
Precisamente, el gesto del Ministerio de Exteriores venezolano llega tras la exigencia de la Asamblea Nacional de romper relaciones entre ambos países, como respuesta a la proposición no de ley aprobada en el Congreso de los Diputados español que insta al gobierno de Pedro Sánchez a reconocer a Edmundo González Urrutia como ganador de las elecciones del 28 de julio.
Venezuela los justifica por unas declaraciones de Margarita Robles
El ministro de Exteriores venezolano, Yvan Gil, ha justificado la cita al embajador de España por los comentarios «insolentes, injerencistas y groseros» de la ministra de Defensa española, Margarita Robles.
Robles participó este jueves en la presentación de un libro, en un acto no oficial y sin cobertura de medios de comunicación, y allí calificó a Venezuela de «dictadura». El ministro venezolano ha considerado que estas declaraciones «apuntan a un deterioro de las relaciones entre ambos países».
El PP ha alabado las palabras de Robles y ha pedido al Gobierno que retire al embajador en Venezuela.
El Gobierno español ha intentado evitar el choque con el de Nicolás Maduro desde que las elecciones del 28 de julio se saldaran con acusaciones de fraude por parte de la oposición, representada por su principal candidato, Edmundo González. González llegó a España el pasado domingo para solicitar asilo.
Moncloa ha declarado que quiere mantener abiertas todas las vías diplomáticas para mediar con Venezuela y ha insistido en que su postura es la misma que tiene la Unión Europea: no reconocer a un vencedor hasta que se publiquen íntegramente las actas electorales.
El jueves, el Gobierno restó peso a las amenazas de la Asamblea venezolana y aseguró que las relaciones entre ambos países eran normales, a la vez que Sánchez recibió a Edmundo González en La Moncloa.
El PP ha registrado en el Senado otra iniciativa similar a la que ya salió adelante en el Congreso el miércoles. En esta ocasión añaden una propuesta para pedir al Gobierno que se dirija a la Corte Penal Internacional y que esta dicte una orden de arresto contra Nicolás Maduro.