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30 de junio del 2024.- Las fuertes tormentas caídas durante el fin de semana en el centro de Europa se han cobrado la vida de al menos cinco personas, tres en Francia y dos en Suiza.
En Francia, tres personas han muerto tras caer un árbol sobre su vehículo cuando circulaba por una carretera comarcal cerca de la localidad de Brienne le Chateau, en el departamento de Aube. Un cuarto ocupante del automóvil ha resultado herido muy grave, según los bomberos.
Por otra parte, un deslizamiento de terreno en el cantón suizo del Tesino ha dejado tres muertos y un desaparecido. El corrimiento de tierras se ha reportado en el valle del Maggia, donde las carreteras han quedado cortadas, al menos un puente ha quedado destruido y se han evacuado al unas 400 personas de varios campings y viviendas. Además, en el cantón de Valais, un hombre ha muerto en un hotel de la ciudad alpina de Saas-Grund. La policía ha informado que fue probablemente sorprendido por la inundación provocada por la nieve derretida y agravada por las violentas tormentas.
Las tormentas con fuertes vientos y un importante aparato eléctrico que han barrido amplias zonas del norte y noreste de Francia han causado importantes daños en la ciudad de Troyes y en otras zonas, con caída de árboles, daños en edificios y cierres de parques y suspensión de actividades al aire libre como medidas de prevención.
Mientras, en la vecina Suiza las abundantes lluvias caídas han desbordado varios ríos, entre ellos el Ródano, uno de los principales del país. Además, tres valles de la región del Tesino han quedado aislados, y en la zona se ha interrumpido el suministro eléctrico y el de agua ha quedado contaminado, mientras la policía ha pedido a la población que limite sus movimientos.
Más al oeste, en el cantón de Valais, donde se encuentra el curso alto del Ródano, el río se ha desbordado en varias zonas, obligando a evacuar a cientos de personas en las principales ciudades de ese tramo del río, Briga y Sion. También se ha evacuado de forma preventiva la zona industrial de Aigle, en las proximidades de la desembocadura del Ródano en el lago Lemán.
La situación ha obligado a interrumpir el transporte ferroviario en algunas zonas de Valais, así como el tráfico en la autopista A9, en la misma zona donde se han ordenado las evacuaciones.
Lluvia y granizo en zonas montañosas del Piamonte y el Valle de Aosta
También Italia ha sufrido los efectos de las tormentas, especialmente en zonas montañosas de las regiones del Piamonte y el Valle de Aosta, en el norte del país, que han sido azotadas por la lluvia y el granizo, lo que ha llevado al desborde de ríos, a inundaciones, deslizamientos de tierra o evacuaciones de personas.
Según la prensa local, los equipos de rescate han evacuado con helicóptero a decenas de personas atrapadas en un refugio de montaña en Macugnana (Piamonte). También casi cien personas han sido evacuados de dos localidades de la zona donde el agua inundó las calles de áreas residenciales.
El presidente del Piamonte, Alberto Cirio, ha solicitado la declaración del estado de emergencia tras los estragos por el mal tiempo. «Nuestros técnicos trabajan y llegan a las zonas afectadas para una primera evaluación de daños y concretar con los municipios las primeras intervenciones urgentes», ha dicho Cirio.
Otras 200 personas, entre residentes y turistas, han sido también evacuadas por helicóptero en el valle de Cogne (Valle de Aosta) después de que la única carretera en el área sufriera daños por una fuerte inundación.
Según Angelo Bonelli, diputado de la fuerza de la oposición Alianza Verdes-Sinistra, lo sucedido es otra muestra de «los signos de la crisis climática» que el Gobierno italiano liderado por Giorgia Meloni «aún niega y nunca aborda».
«Tormentas, inundaciones y granizos han azotado el Valle de Aosta y el Piamonte, mientras que el sur de nuestro país está devastado por la sequía», ha lamentado Bonelli, quien ha instado al Ejecutivo a declarar «el estado de crisis climática» y a «invertir recursos para afrontarla».
