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19 de mayo del 2024.- El Ejército ucraniano ha anunciado este domingo que ha hundido un buque detector de minas ruso desplegado en el puerto crimeo de Sebastopol. No obstante, las autoridades rusas aseguran que el ataque no ha causado daños ni a la infraestructura ni ha dejado víctimas.
Ucrania ha identificado el navío hundido como el Kovrovets, que forma parte de la flota rusa del Mar Negro y que ha sido «eliminado gracias a los potentes bombardeos nocturnos que resonaron en la península temporalmente ocupada», según ha comentado las autoridades.
Por su parte, el gobernador ruso de Sebastopol, Mijail Razvozhaev, ha informado de un «ataque nocturno» de las tropas ucranianas «que no ha dejado víctimas», además de ser repelido por las fuerzas antiaéreas.
Razvozhaev ha querido agradecer, por medio de su cuenta de Telegram, «a los empleados de los servicios públicos, a los especialistas del servicio de rescate de Sebastopol, a los técnicos del Ministerio de Situaciones de Emergencia y la Guardia Nacional por su rapidez al retirar casi todos los fragmentos caídos para su posterior destrucción».
Efectivos aéreos «degradados»
La Inteligencia militar británica estimaba que los ataques ucranianos contra posiciones rusas en la península de Crimea acabarían provocando la «dispersión» de los efectivos aéreos de Rusia desplegados allí, y que ya se encuentran bastante «degradados».
En su última evaluación publicada este sábado, el Ministerio de Defensa británico recuerda un último ataque ucraniano ocurrido el pasado 14 de mayo, que provocó la destrucción de dos aviones de combate MiG-31, una batería de misiles rusa SA-21, además de un modelo Grave Stone en el aeródromo de Belbek.
El ataque de esta madrugada ha sido el cuarto de los últimos 30 días, provocando pérdidas a la Defensa Aérea rusa en Crimea después de los efectuados en la instalación antirradar de Ai-Petri, el 12 de mayo, y los dos en el aeródromo de Dzhankoy, el 16 y el 29 de abril.
Rusia habla de un aumento de los ataques ucranianos
Rusia ha destacado un aumento de ataques ucranianos a su territorio desde la apertura de un nuevo frente en la región de Járkov y que ha obligado a evacuar a más de 10.000 personas. Durante la jornada del domingo, las autoridades rusas han informado el lanzamiento, por parte de Ucrania, de 62 drones contra regiones rusas, obligando a una refinería de petróleo en el sur a detener sus operaciones.
Al mismo tiempo, las autoridades han acusado a las fuerzas ucranianas de utilizar armamento estadounidense y francés contra territorio ruso. Ante esta situación, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha valorado que existe riesgo de desencadenar una guerra más amplia entre Rusia y Occidente si Ucrania continúa utilizando armas occidentales.
El pasado viernes, Putin aseguró que no tenía pensado tomar Járkov, aunque su objetivo es crear allí un amortiguador para proteger a Rusia de tales ataques.
