Columna Política «Diputado 501», Por Antonio TENORIO ADAME (30-X-2022).- A nueve días de celebrarse las elecciones intermedias de los Estados Unidos aparecen, en cielo despejado, nubarrones que amenazan un cambio de temperatura.
DEBATE POR LA NEGATIVA
Los Estados Unidos de América se preparan a renovarse el 8 de noviembre en elecciones . El Congreso se renovará en los 435 distritos electorales; el Senado someterá a elección 34 escaños y en los estados se someten a elección 36 gubernaturas.
De tal suerte se decide la capacidad de gobernanza del Ejecutivo al depender de obtener la mayoría de los miembros de las Cámaras del Senado y de Representantes, con lo cual se define, también, la continuidad o no de Joe Biden en la Presidencia,; de ese tamaño es el reto.
El desafío es crucial por la diferencia entre los Partidos Demócrata y Republican, cuyas fuerzas es similar en el Senado y reducida a 27 votos en la Cámara de Representantes.
Los comicios federales de la Unión Americana transmiten efectos internacionales; como es sabido la injerencia directa o indirecta de otros países para favorecer o entorpecer a uno u otro partido, como fue comentado con amplitud los servicios electrónicos de Rusia a favor de Trump en 2016.
Para México la situación es distinta, no hay margen de abstención, los efectos son directos se quieran o no,; la agenda electoral cualquiera que sea el candidato se encuentran asuntos concernientes a la vecindad entre las fronteras.
Este escenario se agrava si ocurre una participación de agentes oficiales del gobierno mexicano, como ocurrió durante la confrontación entre Hillary Clinton y Donald Trump .
El desliz oficialista y de algunos militantes partidistas se vio trastocado por el ascenso desmesurado del candidato antisistema, Trump, que pronto remontó la diferencia; los efectos del gobierno de Peña Nieto acudieron de inmediato a querer enmendar el error de intervenir en asuntos ajenos del exterior al afectar el interés nacional.
DEBATE POR LA AFIRMATIVA
El remedio resultó más desastroso, aliviantar al candidato republicano a visitar México, obligándose a rendir el protocolo a quien no le correspondía y volver a ofender a sus anfitriones como reiterada muestra de supremacía.
El lamentable suceso no es una anécdota sino una costosa experiencia del necesario conocimiento de una realidad que rebasa la capacidad de comprensión gubernamental, así como otras instancias sociales de la nación, en especial aquellas ligadas a la migración.
Es preciso determinar los valores en juego en las elecciones del vecino del norte, con el fin de entender mejor los factores de riesgo y las oportunidades a favor que presenta tan importante coyuntura,; en primer término, no apostar a intervenir en un proceso interno que solo compete a los electores con derecho a votar, dentro de los cuales una proporción importante corresponde a migrantes latinos, quienes acuden a las urnas con distintas preferencias partidarias en el ejercicio de su libre albedrío.
Precisamente es a ellos a quienes se dirigen los resultados de la presente investigación: “Los latinos en las elecciones USA”, (Rodolfo Sánchez 2022) ya que la importancia de un voto mejor informado contribuye indudablemente a elevar la calidad democrática, en especial a la representación en las instancias del poder en una democracia indirecta en el país de mayor importancia política.
La importancia agregada de investigar el comportamiento y tendencias del voto latino, como lo realiza este estudio, son dos de gran importancia; en primer lugar ; resalta y hace visible a los potenciales votantes latinos, lo cual es significativo porque en el caso mexicano ocurre que no votan ni aquí ni allá, como una inercia acumulada, y segundo término, pone de relieve el carácter del sistema electoral del vecino país, como un elemento que debe conocerse para evitar caer en posiciones extremas, como la amarga experiencia del gobierno de Peña, o la insólita admiración o simpatía en amplios sectores mexicanos por el Partido Demócrata.
Hoy se dice que el atractivo hacia los Demócratas se ha perdido por las sucesivas frustraciones de promesas de una Ley Mgratoria que regule a los “sin papeles”, ya que Obama en 2008 ofreció dicha regulación en un año, Hilary Clinton prometió legislar en 100 días y Biden en su primer día de gobierno. Sin embargo, no se ha contado con el respaldo suficiente de votos en el Capitolio para resolver la situación migratoria de 10 millones de migrantes, y ésta se mantiene en el aire; no hay pa’cuándo.
El voto latino, a la vez, es un instrumento de ascenso social para todos aquellos que conforman el grueso de la población migrante de grado reciente en el país, conformado por el flujo de continuas migraciones, desde la llegada en 1620 de los pioneros del “Mayflower”, pobladores de la Bahía Plymouth.
VOTACION EN LO GENERAL
Los Estados Unidos es una nación con tradición abierta a migraciones, las que por su origen y tiempo de arribo se distinguen entre sí, o sea marcan su “identidad”, de tal modo los migrantes latinos por su idiosincrasia y, al ser la de más reciente adopción, se encuentran sujetos a obstáculos de inserción social y política que requiere ser vencida por medio de la participación en las instancias democráticas, en especial, las de orden electoral.
En cierta manera éstas son las de mayor importancia, dado que el estrato poblacional latino no dispone de organismos como la del “lobby”, en las salas del Congreso, aunque la importancia de su voto ha conseguido aumenta su presencia en los asientos de la Cámara de Representantes.
Es en esa vía en la que una mayor asistencia a las urnas del conglomerado latino haría que su participación se traduzca en mayor poder de negociación en los rubros del presupuesto de gobierno, donde se reflejan el destino de las políticas públicas.
Muy pronto obtendremos resultados.