03 de agosto del 2022.- China ha iniciado este miércoles maniobras militares cerca de Taiwan, tal y como anunció tras el aterrizaje de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, en la isla autogobernada reclamada por Pekín. El ministerio de Defensa taiwanés ha advertido de la presencia de 27 aviones chinos en su zona de defensa aérea, de los cuales 22 habrían cruzado la línea media que separa la isla del gigante asiático. Está previsto que los ejercicios duren hasta el domingo.
Taiwán ha condenado «enérgicamente» la maniobra iniciada por China, a la que acusa de «violar gravemente» sus «derechos y soberanía territorial».
«Condenamos enérgicamente los ejercicios militares chinos», ha declarado el subdirector de la División de Investigación de Leyes, Asuntos Judiciales y Regulaciones de la cartera de Defensa, Yu Jian-chang, citado por la agencia taiwanesa CNA. Las acciones de Pekín, ha dicho, «quebrantan la Convención de las Naciones Unidas sobre el Mar».
El martes, el ejército chino anunció la realización de ejercicios aéreos y marítimos conjuntos cerca de Taiwán y lanzamientos de prueba de misiles convencionales en el mar al este de la isla. En concreto, se anunciaron «disparos reales» en aguas de la costa oriental, así como entrenamientos marítimos y aéreos conjuntos al norte, suroeste y sureste.
Según un mapa facilitado por la agencia de noticias china Xinhua, una de las áreas en las que se llevarán a cabo las prácticas está a unos 20 kilómetros de la costa de Kaohsiung, la principal ciudad del sur de Taiwán.
Taiwán advierte que sus fuerzas «responderán a cualquier acción»
El ministerio de Defensa de Taiwán se ha referido a los ejercicios como un «esfuerzo unilateral para socavar la paz y la estabilidad regionales», al tiempo que advertía de que «no ayudarán a la imagen internacional de China». Ha asegurado, además, que las fuerzas taiwanesas «responderán a cualquier acción».
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China considera que Pelosi ha cruzado lo que consideran «una línea roja» y que su visita, la primera de un presidente de la Cámara de Representantes desde 1997, perjudica la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán, daña los fundamentos políticos de las relaciones entre Estados Unidos y China e infringe la soberanía y la integridad territorial de China.
Nancy Pelosi llegó a la isla con el mensaje de que Estados Unidos «no abandonará» a la isla y tras su partida ha alegado que China «no puede impedir» que líderes mundiales o cualquiera visite Taiwán.
Durante su breve estancia, de menos de 24 horas, la presidenta del Congreso estadounidense, tercera autoridad en su país, se ha reunido con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, y con disidentes y activistas por los derechos humanos.
Con información de RTVE de España