Artículo de fondo «Diputado 501», Por Antonio TENORIO ADAME (13-IX-2021).- La bancada de Morena exhibió el músculo antes de tiempo, al instalar la Legislatura de diputados, presumió de ocupar todos los cargos de gobierno de la Cámara, sin embargo, se topó con la realidad de carecer de mayoría calificada y el reglamento como mandamiento supremo.
MOCIÓN SUSPENSIVA
La renovada Legislatura del Congreso (LXVI)ha echado a andar, tal cual indica el relato de la historia de su patrón titular, San Lázaro, aunque no en los términos como presumía la mayoría oficial de Morena, como una expresión hegemónica y avasallante, sino mediadora sujeta a una normatividad que se ajusta a la realidad de la negociación y por tanto de ceder con base en la reglamentación y funcionalidad de la institución.
La instalación orgánica de la nueva Legislatura significó ceder, al diputado Rubén Moreira del PRI, la Junta de Coordinación Política para afirmarse en la Presidencia de la Mesa Directiva , con el diputado Sergio Gutiérrez Luna, abogado egresado de la Libre de derecho, quien ha realizado una carrera legislativa meteórica, al gestarse en el seno del PAN sonorense como asesor del Poder judicial local, cobijarse en el grupo de Morena en Texcoco, nutrirse en la sombra del diputado y ocupar el sitial del INE con la representación de Morena donde mostró su capacidad técnica profesional, como legislador impulsó las reformas más recientes al reglamento, al generar la posibilidad de que la Mesa directiva de la Cámara se mantenga durante un periodo continuo que incluya el tiempo o el total que le corresponda en vez de que se divida en forma alterna.
Si se califica al presidente de la Mesa diríase que su visión del Congreso y su capacidad argumentativa y de operación es evidente, la diferencia superior, a la del colegislador Ignacio Mier, quien dispone de la Coordinación del grupo parlamentario; una comparación necesaria si se tiene en cuenta que ambas instancias del grupo interior son competitivas entre sí, ya que la segunda se mantiene como un instrumento de dominio interno a partir de los tradicionales Congresos plurales con tendencia al control administrativo más que la suma de alianzas fraternas que conjugan la investidura del Presidente de la Mesa Directiva como representante de todos los diputados.
Desde la Cámara de diputados es de dominio popular que se influirá en la designación de la candidatura del Estado de México donde el presidente de la Mesa juega a favor de Horacio Duarte Olivares quien abrió las puertas de Morena al actual presidente de los diputados.
POR LA NEGATIVA
Los Trabajos del Congreso se han modificado desde sus principios, como ocurrió en la Sesión de Congreso donde las dos Cámaras se reunieron para la apertura el Primer periodo de sesiones, con el fin único de declarar su reunión de ambas representaciones y recibir el Informe del Ejecutivo sobre el estado que guarda la nación. Este protocolo era con el fin de que el presidente acudiera a reconocer la primacía del Poder originario de representación de la soberanía.
Se difundió equivocadamente con anterioridad, que, al suprimir la obligación del presidente de acudir al Congreso, se evitó el Día del presidente, sin que ahora se reconozca la distorsión en que se incurrió. Ahora se instituyó el Día del secretario de Gobernación, a quien le dieron el zalamero “besa manos” de rigor.
En la desmesura de la 4T se abandonó el concepto de sesión solemne de Congreso. Al estimarla como del pasado, ahora ocurrió que terminada la Reunión de Congreso se procedió en sesión ordinario, así:
A). – En la plenaria del Senado se sometió a proceso legislativo la iniciativa de la pregunta para la consulta popular, cuya pregunta se modificó con la aportación de la oposición del mandato revocatorio con la aprobación de la asamblea.
B). – Por su parte la Cámara de Diputados sujetó a discusión la iniciativa de ley sobre el juicio político y la declaración de procedencia.
Uno de los motivos de la enmienda radica en el problema de competencia y responsabilidad entre las disposiciones obligatorias para acatarse por los Congresos locales, como en el caso de Tamaulipas que se coluden con el gobernador para impedir su desafuero.
Por otra parte, se dice: “En cuanto a la responsabilidad penal del presidente de la República, el dictamen indica que durante el tiempo de su encargo podrá ser imputado y juzgado por traición a la patria, hechos de corrupción, delitos electorales y todos aquellos delitos por los que podría ser enjuiciado cualquier ciudadana o ciudadano”. Si los diputados aprobaron la reforma sin variante alguna, no ocurre igual en el Senado, donde ya se atoró, al saltar la contradicción de competencias entre el Poder legislativo federal y el local.
¿Ahí inicia el atasco?