24 de junio del 2020.- La pandemia producida por la crisis global del coronavirus podría estar detrás de las 140,000 muertes más que se han registrado durante los meses de marzo y abril en el continente europeo. Tras analizar los datos proporcionados por 21 países, la oficina de estadística comunitaria Eurostat ha publicado una nota (en ingles) donde se muestra este exceso con respecto a los cuatro años anteriores -desde 2016-.
«El impacto de la pandemia se puede evaluar por el aumento en el número total de muertes por cualquier causa notificadas durante el brote», ha subrayado el organismo, que especifica que, entre los más de 20 países en los que hay datos disponibles, «hubo alrededor de 140.000 muertes más durante las semanas 10 a 17 del año (marzo-abril) en 2020 que el número promedio de muertes durante el mismo período de los años comprendidos entre 2016 y 2019». No obstante, precisan desde la institución que se trata de información preliminar.
El listado completo de naciones que cuentan con datos en los períodos mencionados previamente es el siguiente: Bélgica, Bulgaria, Chequia, Dinamarca, Alemania, Estonia, España, Francia, Italia, Lituania, Luxemburgo, Hungría, Austria, Portugal, Eslovaquia, Finlandia, Suecia, Islandia, Noruega, Suiza y Liechtenstein.
Italia, el primer país que marcó el aumento de muertes…
Aunque los meses de marzo y abril fueron los que más decesos contabilizaron, fue en concreto en la semana 14 -del 30 de marzo al 5 de abril- en la que registró el mayor pico de muertes. Además, la evolución de la pandemia no fue por igual en todos los países, de ahí que no todos hayan compartido los períodos más mortíferos.
Durante la semana 11 -9 al 15 de marzo-, por ejemplo, se aprecia que Italia fue el territorio que más muertes notificó en ese período. Mientras, en las dos semanas siguientes -la 12, entre el 16 y el 22 de marzo, y la 13, del 23 al 29-, el exceso de mortalidad está más repartido, ya que nueve de cada diez muertes tuvieron lugar en España, Italia y Francia. En cuanto a las regiones, las más afectadas fueron la situadas al norte de Italia, el centro de España, incluyendo Madrid, el este de Francia y su capital, París, así como algunas regiones belgas.
La oficina europea, además, ha señalado que el exceso de mortalidad afectó más a hombres que a mujeres. En cuanto a los colectivos por edades, dejando al margen a Alemania, el más golpeado fue el de los mayores de 70 años, con un 40 % de decesos más entre los hombres y un 30 % entre las mujeres.
…y Lodi, la región italiana que marcó el origen
El aumento de muertes comenzó, según los datos de Eurostat, en la semana 9 -del 24 de febrero al 1 de marzo-, concretamente en la provincia italiana de Lodi, en Lombardía, una de las más afectadas, pues en ella se registraron más del doble de decesos que en la misma semana de los cuatro años anteriores.
Una semana más tarde, la 10 -del 2 al 8 de marzo-, otras dos provincias italianas, Bérgamo y Cremona, comenzaron a mostrar los mismos patrones que la de Lodi, que repitieron entre el 9 de marzo y el 15 de marzo las regiones españolas de Soria, Segovia y Madrid. En Francia la subida no fue notoria hasta la semana 12, cuanto en el Alto Rin se detectó hasta el triple de muertes que las notificadas en ese período entre 2016 y 2019.
Más tarde, en las semanas 13 y 14, Guadalajara, Ciudad Real y Albacete, todas provincias de Castilla-La Mancha, fueron las siguientes. No fue hasta abril, durante la semana 15, cuando la mortalidad en España e Italia cayó, tal y como ocurriría posteriormente en el resto de países europeos, coincidiendo con el paso del foco de la pandemia a América, con Estados Unidos y Brasil liderando el número de contagios y muertes a nivel mundial.
Con información de RTVE de España