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*Raymundo Arreola Ortega.
«La Columna», Por José Cruz Delgado (29-I-2020).- Mientras que los morenistas andan de la greña por sus broncas internas, los perredistas andan muy activos al igual que los priistas, mientras que los panistas, petistas del Verde y Movimiento Ciudadano, quien sabe dónde andarán.
Los del Partido de la Revolución Democrática echaron a andar su maquinaria porque quieren refrendar la gubernatura, y un personaje que anda muy activo es el diputado local y ex presidente de ese instituto político, Antonio Soto Sánchez, pues en días pasados sostuvo encuentros con liderazgos de los municipios de los distritos Local y Federal, de Los Reyes y Jiquilpan donde acordaron sumar esfuerzos por la consolidación de acciones afirmativas que abonen a detonar el desarrollo y progreso de Michoacán.
Por cierto, se habló sobre las ventajas que tiene para la entidad el que se cristalizara la federalización de la nómina educativa, por lo que coincidieron en cerrar filas, para aportar, desde todas las trincheras, al crecimiento del estado y su gente.
La verdad que se están moviendo muy rápido y los perredistas se ve no quieren perder, por ello los liderazgos de la región acordaron ir juntos y sumar esfuerzos con Antonio Soto, para el impulso de proyectos productivos que generen bienestar en la región y con ello, seguir construyendo en pro de Michoacán.
Es verdad lo que señala Toño Soto, el trabajo coordinado es la vía efectiva para lograr el crecimiento de nuestro país; por ende, consideró positivo que el gobierno federal accediera al planteamiento que venía realizando el Gobernador Silvano Aureoles Conejo sobre la federalización de la nómina educativa.
Los liderazgos de la zona agradecieron al legislador el que hubiera acudido con ellos porque sirvió para que expusieran sus necesidad que a la vez serán planteadas por el diputado en la Cámara Local.
En entregas anteriores he comentado que es necesario fortalecer a los municipios para que los presidentes municipales den mejores resultados a sus gobernados, pues resulta que Toño Soto coincidió en que efectivamente es necesario generar fortaleza en los gobiernos locales para su correcto desarrollo administrativo, lo que permitirá una mayor eficiencia en el cumplimiento de sus responsabilidades.
Por cierto, mencionó la importancia de acabar con las inercias que han debilitado la figura del municipio en el país, y que en muchas ocasiones radican en la falta de orden para el ejercicio presupuestal de los ayuntamientos.
“Durante los últimos años hemos visto un proceso de reestructuración normativa en el país y en Michoacán, que establezca criterios claros para un mejor desarrollo de las administraciones municipales, sin embargo aún falta que esa estructura legal acabe de aterrizar en la práctica cotidiana de ayuntamientos”.
Un aspecto fundamental para el fortalecimiento de municipios, –apuntó el legislador- es la distribución del gasto por parte de los ayuntamientos, en donde se deje de apostar al engrosamiento de la burocracia, y que el recurso humano con que cuentan sea aprovechado en todo su potencial.
“Las cifras son contundentes, el INEGI nos habla que en un periodo de 12 años un total de 366 municipios en México, registraron un crecimiento del 211 por ciento en su Capítulo 1000, correspondiente al pago de servicios personales, situación que a todas luces debe ser revertida”.
Hoy día la figura del municipio se encuentra en crisis, ya que los ayuntamientos no tienen la capacidad de proveer todos los servicios a su población.
“La situación es todavía más delicada cuando vemos el castigo aplicado por el Gobierno Federal a estados y municipios en materia de recursos, lo que sin duda asfixia de grave manera las posibilidades de acción de los ayuntamientos”.
El diputado recalcó que el fortalecimiento de los gobiernos municipales, en mucho depende de un nuevo modelo de distribución justa entre los diferentes niveles de gobierno en México, por lo que destacó la urgencia de recuperar el federalismo como el camino que permitirá el desarrollo municipal, cerrando el paso a las regresiones centralistas que ahora se buscan retomar.
La verdad tiene mucha razón, y también coincide con el alcalde Nueva Italia, Raymundo Arreola Ortega en que debe haber una mayor equidad en la distribución de recursos a los municipios por parte de la Secretaría de Hacienda, que por cierto, es un tema que nadie quiere tocar y pocos se han atrevido a levantar la voz, pero ya sabemos que el Atila de La Nueva es arrojado.
Arreola Ortega ha dicho que el municipio representa hoy en día, la organización político administrativa básica del Estado Mexicano y la autoridad más cercana de cualquier comunidad satisfaciendo las necesidades más básicas como suministro de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de sus aguas residuales, alumbrado público, entre otros servicios, sin los cuales no se podría hablar de un respeto a los derechos humanos elementales, como agua, salud, seguridad, ni mucho menos desarrollar una comunidad de manera armónica y con bienestar.
Sin embargo, contrario a las múltiples obligaciones que se le han venido estableciendo desde la constitución, en el marco de recaudación fiscal a nivel constitucional y legal, es poco el margen de operación que se le otorga al municipio para recaudar recursos propios, como el cobro del predial y de aquellos servicios que presta el municipio acorde a la constitución, sin embargo dadas las circunstancias de pobreza en las que se encuentra la mayoría de la población de muchos de los municipios de México, y por consiguiente de Michoacán, es que resulta más oneroso la operatividad de la infraestructura para la prestación de los servicios municipales que lo que se puede cobrar por los mismos, generando un déficit presupuestal que se debe de cubrir con las participaciones federales de las que dependen la mayoría de los municipios del territorio nacional, como el de Múgica, mejor conocido como Nueva Italia.
Estas participaciones federales a las que se tienen derecho como municipio se encuentran establecidas en la Ley de Coordinación fiscales a nivel federal, y que permea de igual manera a nivel local.
Esta redistribución de la riqueza nacional a los ayuntamientos es insuficiente para que estos puedan solventar de una mejor manera esta titánica responsabilidad de garantizar derechos humanos como agua potable accesible y suficiente, seguridad pública, tránsito, alimentación, salubridad, etcétera.
Así pues, el 20 por ciento de recursos, es insuficiente para poder garantizar al menos la operación de programas de inversión púbica prioritaria y de gasto social, de ahí que se requiere una modificación a la Ley de Coordinación Fiscal a nivel federal, para que se incremente el porcentaje obligatorio de distribución a los municipios de las participaciones federales y así poder hacer frente a las necesidades básicas de los ciudadanos.
