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Columna «Eje Político», Por Víctor Americano (19-VIII-19).- De acuerdo al Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, por lo menos 10 mujeres son asesinadas cada día en México, cifras que deberían tener en alerta máxima a las autoridades pero también a toda la sociedad; sin embargo, la normalización de la violencia de género es brutal y hemos perdido nuestra capacidad de asombro; cada día se entretejen una gran cantidad de historias de mujeres violentadas, golpeadas, ultrajadas, acosadas y asesinadas, y nos hemos acostumbrado a voltear para otro lado, a dejarlo pasar de largo.
“Es que siempre vistes de minifalda”, “siempre andas caminando sola hasta muy tarde”, “es que provocas que te acosen por esos escotes”, “qué exagerada, solo te dijo un piropo”, todas estas frases entre muchas más, normalizan la violencia y muchas veces provocan conflictos psicológicos en la mujer, que en muchas ocasiones, terminan en callar las denuncias y a la postre ser asesinada por no alzar la voz a tiempo. Por callar la primera vez que se registra un acto de violencia, existe el riesgo de callar para siempre.
#NoMeCuidanMeViolan
Mencionar que la manifestación del viernes pasado #NoMeCuidanMeViolan, no solo en la Ciudad de México, sino, en diversas capitales del país, entre ellas Morelia, ha generado una gran cantidad de comentarios encontrados y de polémica, la mayor parte porque se opina se manera frívola y “por encimita”; y para poder desmenuzar, discernir y llegar al fondo de está reacción, hay que ir a los orígenes, hay que ir al fondo de la problemática, para entender el porqué de esta marcha y las forma en que se desarrolló.
Y es que en las redes sociales, una parte, incluyendo varones, defiende a capa y espada, que los abusos y los asesinatos en contra de las mujeres, son mucho más graves que los graffitis y pintas en monumentos histCifras del Secretariado Nacionalse han registrado en el poañue se registren actos vandatos en contra de las mujeres, son mucho móricos, mientras que otra parte, incluyendo propias mujeres, opinan que todo mundo tiene derecho a protestar, pero sin que se registren actos vandálicos.
Las cifras de los feminicidios
Bien, pues vayamos al fondo del asunto, a lo medular, prepárense… En México han quedado por lo menos 3 mil 300 niñas o niños huérfanos, debido a los feminicidios tan solo en este 2019; además, en la última década un total de 23 mil feminicidios se han registrado en el país; a diario asesinan a 10 mujeres en México de manera violenta… en el 2018, un total de 86 niñas, ¡niñas!, fueron asesinadas por violencia de género. Todas estas Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, e incluso publicadas en diversos reportajes del Diario Español El País.
Si estas cifras no son suficientes para un ¡ya basta!, no sé que es lo que tenga que pasar para gritarle a las autoridades omisas y a veces, cómplices, que estas cifras rojas de la violencia deben terminar de una vez por todas. En fin, si nos vamos al origen de este escabroso tema, nos damos cuenta de que manifestarse, marchar, gritar y exigir, es todo un derecho y debe de ser escuchado y resuelto.
La polémica del vandalismo
Sin embargo, ningún acto de vandalismo debe ser aceptado o normalizado, como un derecho de manifestarse; ni los normalistas, transportistas, antorchistas, estudiantes en general, sindicatos, comunidad LGBTI y tampoco las mujeres y/o hombres hartos de los feminicidios; aunque debo aceptar que en cuestión de prioridades, jamás se va a comparar la vida de una persona, a un edificio o patrimonio histórico rayoneado. Insisto, si se resolviera el origen, lo demás no tendría razón de ser.
Mucho menos se debe normalizar el manifestarse, agrediendo a otras personas inocentes, ya sea con gritos, golpes, diamantina o spray en los ojos y ofensas, entre otras cosas. Es realmente absurdo exigir que se erradique la violencia, con violencia.
¿Y los valores?
No hay que perder de vista lo medular; el origen de todo es la incapacidad de las autoridades de disminuir los asesinatos violentos en este país; pero tampoco hay que perder de vista, que los asesinos son emanados de esta sociedad mexicana, que se encuentra emproblemada en carencia de empleos, salarios muy bajos, altos índices de adicciones y de una pEs realmente absurdo exigir que se erradique la violencia, con violencia.e esta sociedad mexicana, que se encuentra este paa o sérdida de valores impresionante.
Ya lo decía el célebre psiquiatra Karl Augustus Menninger: “Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad”
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