Inicio / Noticias / Seguridad / ROMERO DESCHAMPS: CERCADO POR LA FISCALIA DE LA REPUBLICA (sus últimos días)

ROMERO DESCHAMPS: CERCADO POR LA FISCALIA DE LA REPUBLICA (sus últimos días)

***El fin de varias décadas de corrupción e impunidad

***En la extinta DFS hay un expediente en su contra desde hace 40 años

***Delincuencia organizada, lavado, enriquecimiento ilícito, extorsión

***Algunos de la larga cadena de ilícitos de los que se le acusa

***Una vida insultante de lujos y derroches del líder y su familia

        Por José SÁNCHEZ LÓPEZ (02-VIII-19)

Y los “padrinos” se esfumaron y con  ello el manto protector que lo
convirtió en el amo y señor, por encima de todos directores, de la
empresa más importante de nuestro país: Petróleos Mexicanos.

El cobijo brindado por presidentes de las pasadas administraciones, le
permitió medrar durante décadas con las cuotas de los trabajadores de
PEMEX; hoy, un proceso de desconocimiento a su dirigencia, un amparo
condicionado, el bloqueo de sus cuentas bancarias y nuevas denuncias
en su contra que reactivaron las ya existentes, presagian la inminente
caída de Carlos Antonio Romero Dechamps, que por 30 años hizo y
deshizo a su antojo en la paraestatal.

Romero Deschamps, de 76 años de edad, es miembro activo del PRI desde
la edad de los 17 años, cuando en 1961 inició su carrera política como
coordinador de campañas del tricolor en el estado de Tamaulipas.

Ocho años después, en 1969 ingresó a la empresa más importante de
nuestro país y en 1971 comenzó sus actividades dentro del Sindicato de
Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) donde escaló
diversas posiciones, si bien de cierta importancia, ninguna de alta
jerarquía.

Cercano a Carlos Salinas de Gortari desde que este era secretario de
Programación y Presupuesto, a su arribo como presidente de la
República, Romero Deschamps cobró relevancia inusitada y se convirtió
en informante del nuevo mandatario.

Se dice que Romero Deschamps fue quien informó a Salinas de Gortari
respecto a quien había patrocinado el libro “Un asesino en la
Presidencia”.

El autor había sido José Luis González Meza, hoy supuesto abogado de
Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, y quien habría financiado el libelo
había sido el entonces secretario general del Sindicato de
Trabajadores Petrolros de México, Joaquín Hernández Galicia, “La
Quina”.

Un mes y nueve días de que Salinas asumió la Primera Magistratura, el
10 de enero de 1989, se dio lo que todos conocimos como “El Quinazo”,
cuando Hernández Galicia fue detenido en Ciudad Madero, Tamaulipas. En
su lugar fue nombrado Sebastián Guzmán Cabrera, que sólo permaneció
cuatro años en el puesto, tras la llegada de Carlos Romero Deschamps,
quien asumió el liderazgo del sindicato petrolero el 22 de junio de
1993.

Desde entonces, hasta este al 24 de julio, al ser expulsado por la
Asamblea de Sindicatos de Petroleros por supuestos actos de
corrupción, fungió como dirigente del STPRM, en representación de 120
mil trabajadores, tras haber sido reelecto cinco ocasiones
consecutivas.

Como ágil saltimbanqui político, desde hace 40 años se encaramó en el
Poder Legislativo, lo mismo como diputado que coo senador, aunque
siempre como plurinominal, es decir por “dedazo”. Ha sido 5 veces
legislador de representación proporcional. Tres veces diputado,
1979-1982, 1991-1994 y 2000-2003 y 2 veces senador, en los periodos de
 1994-2000 y 2012-2018.

En la extinta Dirección Federal de Seguridad (DFS), hay un expediente,
desde hace 40 años, en el que el Romero Deschamps, quien aún no era
líder sindical, fue acusado de secuestro, lesiones, venta de plazas,
desvío de recursos y tráfico de combustible, conocido ahora como
“huachicoleo”.

Bajo presiones sindicales, obtuvo por parte de PEMEX, tiendas, ranchos
y concesiones en construcción, transporte y diversos negocios, desde
mantenimiento hasta funerarias y gasolineras, dedicándose a
“privatizar” esas concesiones en beneficio de su familia y amigos.

En el año 2000 se hizo público el primer escándalo de índole
electoral, cuando se dio a conocer un desvío de fondos, denominado
“Pemexgate”, documentado por el Instituto Federal Electoral, donde se
registró un desvío de mil 500 millones de pesos de los fondos
sindicales, en apoyo a la campaña presidencial del enronces candidato
priista, Francisco Labastida Ochoa.

En 2003 la PGR, ahora Fiscalía General de la República, inició un
proceso judicial por el delito de peculado electoral, sin embargo el
proceso fue suspendido en 2006, en el mandato de Vicente Fox, por
falta de pruebas, y cinco años después, en 2011, siendo presidente
Felipe Calderón. el proceso fue dado por finalizado de manera
inapelable.

Según acusaciones, Romero Deschamps ha forjado su patrimonio
multimillonari, a costa de una empresa pública que está quebrada y
pese a ello, el líder vive como jeque árabe con un sueldo de 44 mil
pesos mensuales, conforme a la nómina de PEMEX.

A Romero Deschamps se le ha acusado de delincuencia organizada,
operaciones con recursos de procedencia ilícita (lavado de dinero),
defraudación fiscal, fraude, enriquecimiento ilícito, extorsión,
malversación de recursos otorgados por PEMEX y amenazas cumplidas, sin
faltar el robo de combustible e insumos, es decir “Huachicoleo”.

Al ser ungido como presidente Andrés Manuel López Obrador, y una vez
transformada la Procuraduría General de la República en la Fiscalía
General de la República, con el doctor Alejandro Gertz Manero al
frente, el 27 de diciembre de 2018, un contingente de trabajadores
petroleros, cuestionaron al nuevo mandatario al que preguntaron qué
iba a pasar con Carlos Romero Deschamps, a lo que AMLO respondió: “no
vamos a tolerar a nadie, sea de alto nivel o trabajador
sindicalizado”.

El primer aviso que recibió Romero Deschamps de que las cosas habían
cambiado, fue el martes 9 de este mes, cuando fue detenido su abogado
Juan Collado Mocelo, representante legal también del ex presidente
Carlos Salinas de Gortari y familia y del también ex mandatario,
Enrique Peña Nieto.

Ese día el susto fue mayúsculo, pues ante la llegada de los agentes
federales ministeriales al exclusivo restaurante, el líder petrolero
se tiró al piso y permaneció inmóvil, sin hacer ningún movimiento,
hasta que uno de los agentes, en tono burlón, le dijo que no iban por
él sino por su abogado.

Antes, el 27 de febrero, Sergio Morales, líder del Frente Nacional
Petrolero, interpuso una denuncia contra Romero Deschamps por fraude a
petroleros y por administración fraudulenta al frente del STPRM.

Sergio Carlos Morales dijo que Romero Deschamps, secretario general
del sindicato, cometió un fraude en contra de todos los trabajadores
durante más de 30 años y que a pesar de que no puede haber un cálculo
preciso, el monto de lo defraudado podría ser el resultado de 30 años
cobrándole a un promedio de 120 mil trabajadores entre 180 y mil 600
pesos mensuales.

-Si actualmente se cobrara a los 120 mil trabajadores la cuota de 180
pesos mensuales, apuntó el denunciante, serían 259 millones 200 mil
pesos al año y han sido 30 años de cobrar esas cuotas, advirtió.

Posteriormente se conocería que la Secretaría de Hacienda, a través de
la Unidad de Inteligencia Financiera, a cargo de Santiago Nieto
Castillo, presento dos querellas ante la Fiscalía General de la
República por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.

Pero la acusación no sólo había sido en contra del líder petrolero,
sino también figuraron varios de sus familiares: su esposa Blanca Rosa
Durán, sus hijos Paulina, Alejandro y Juan Carlos Romero Durán, así
como María Fernanda Ocejo, esposa de Juan Carlos Romero, y Ana Luisa
Aguinaco Romero, hijastra de María Esther Romero, hermana del
dirigente petrolero.

La acusación en general, fue por los delitos de enriquecimiento
ilícito y lavado de dinero, al detectar depósitos bancarios,
operaciones con cheques y transferencias a través del Sistema de Pagos
Electrónicos Interbancarios (SPEI), realizados entre los familiares de
Romero, sin que se justifique el origen y destino del dinero.

Ante ello, Romero Deschamps recurrió a la protección del Poder
Judicial de la Federaciópn e interpuso un amparo ante el juez Décimo
Cuarto de Distrito con sede en el Estado de México que le concedió una
suspensión definitiva.

De inmediato el Consejo de la Judicatura Federal aclaró que la medida
fue otorgada porque los jueces que el quejoso señaló como responsables
no informaron, dentro del término, si había o no una orden de
aprehensión en su contra y al no informar, se da por hecho que si hay
un andato de captura.

Empero, el CJF precisó que dicha suspensión no surte efectos si los
delitos imputados merecen prisión preventiva oficiosa ( y en este caso
si la ameritan), además de que si el quejoso no comparece ante el juez
que hubiese librado la orden de aprehensión dentro del plazo de tres
días, el amparo deja de tener efectos.

Esto es, se trata de un amparo condicionado, endeble ante la más
mínima falta legal del acusado que podría oriinar su anulación.

Aunado a ello, el 21 de este mes, derivado de la carpeta de
investigación en la Fiscalía Anticorrupción por enriquecimiento
ilícito, con el folio FED/FECC/FECC-CDMX/66/2019, la UIF logró
bloquear las cuentas de Romero Deschamps y de sus familiares.

Posteriormente, el 25 de este mes, durante una Convención
Extraordinaria, trabajadores petroleros de las 36 secciones del STPRM,
mediante voto libre, directo y secreto, expulsaron de sus filas al
dirigente Romero Deschamps y desconocieron las decisiones de la
Convención de 2017, en la que se reeligió a Romero Deschamps un año
antes de que terminara su mandato.

En su lugar, los agremiados eligieron a Sergio Carlos Morales, uno de
los denunciantes de Romero Deschamps, como nuevo líder petrolero que
deberá enviar la documentación de los resolutivos de la Convención
para solicitar la toma de nota, pero antes el proceso debe ser
notificado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) para
ratificar su legalidad o rechazarlo.

En relación con los fondos del sindicato, una de las nuevas denuncias
señala que de los 300 millones de pesos que le entregó PEMEX al STPRM,
la organización sindical sólo reportó gastos por 68.7 millones de
pesos, es decir que nada más  dio a conocer en qué se gastó el 20 por
ciento de los recursos asignados, de los demás no informó nada.

A las denuncias enunciadas, hay muchas otras más por diferentes
delitos a las que ya da cauce la FGR, por lo que se prevé que en breve
podrían darse nuevas resoluciones en contra de Romero Deschamps y
familiares.

Cabe destacar que en repetidas ocasiones, el estilo de vida de Romero
Deschamps y de su familia ha despertado críticas acerca de la
procedencia de los recursos que financian sus millonarios derroches.

Tan sólo en lo que respecta a Carlos Romero Deschamps, se enlistan
bienes y propiedades como yates, departamentos y otros inmuebles, así
como automóviles de lujo, los cuales tienen un valor en su conjunto
por más de 252 millones de pesos.

En septiembre de 2012, se conocieron fotografías de su hija Paulina,
en las que exhibe y presume una vida de multimillonaria. Luce siete
brazaletes #Cartier, de oro, que simbolizan los siete días de la
semana, “para atraer la buena fortuna”, con valor de 2 millones de
pesos.

Pao, como la llaman en el Jet Set, es propietaria de un yate de lujo
denominado “El Indomable”, con valor comercial estimado en 35 millones
de pesos, que se encuentra anclado en el muelle Mundo Marino en
Cancún, Quintana Roo”.

Otro miembro de la dinastía Romero, es Alejandro Romero Durán, dueño
del yate “El Guly”, con valor de más de 20 millones de pesos, además
de residencias de lujo y de una cadena de restaurantes al sur de la
Ciudad de México.

Se supo también que José Carlos Romero Durán, compró un automóvil
Ferrari Enzo, con valor de 2 millones de dólares, sólo que para que el
cliente pueda adquirir esa clase de modelo, de edición limitada, debe
comprobar que, al menos, es propietario de otros dos vehículos
Ferrari.

El junior, junto con su esposa María Fernanda Ocejo Garrido, posee dos
departamentos de lujo en Miami Beach, Estados Unidos, con un valor de
40 millones de pesos y otro valuado en 120 millones de pesos.

Esther Romero Deschamps, hermana de Carlos, cuenta con una mansión en
el Fraccionamiento Campestre, en Salamanca, Guanajuato, con un valor
estimado en más de cinco millones de pesos. Se dice que se jubiló en
Pemex sin haber trabajado durante muchos años.

Ahora, paree que todo ese boato ha llegado a su fin, tras el cambio de
gobierno y paulatinamente, se suman y suman más denuncias a las que
ahora si dan cauce.

Con Carlos Salinas se dio “El Quinazo”, con Ernesto Zedillo el
“Salinazo” (Raúl Salinas ue a dar a la cárcel), con Peña Nieto el
“ElBazo” y ahora con López Obrador ¿sería el “Romerazo”?

*******

Ver también

El flagelo del hambre avanzó un 10% en el último año: más de 340 millones la sufren en el mundo

22 Noviembre 2024 Salud La agencia de la ONU que distribuye comida necesita 16.900 millones …

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *