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*Renunció Carlos Urzúa a Hacienda.
*#Crisis en el Gobierno de AMLO#.
*Desdeña Dimisiones del gabinete.
Columna Coordenadas Políticas», Por Fernando Pérez Chávez (10-VII-19).- En siete meses el gobierno de Andrés Manuel López Obrador está en crisis y de desborona, pero el presidente no quiere verlo y minimizo la renuncia del secretario de Hacienda, Carlos Urzúa Macías, como ha desdeñado la decena de dimisiones de funcionarios en su gabinete de la Cuarta Transformación, pero su salida traerá consecuencias en la economía a corto y mediano plazo.
La renuncia de Carlos Urzúa no es un simple movimiento más en el gabinete y la consecuencia más preocupante es la profundización de la crisis de credibilidad que ya se venía gestándose en torno al equipo económico del gobierno López Obrador y que denuncio Germán Martínez, cuando presentó su renuncia a la dirección del IMSS.
Y como en política la forma es fondo, la forma en que renunció Urzúa deja ver que había diferencias con el presidente Andrés Manuel con él que trabajo en la Jefatura del Distrito Federal y subió a las redes el texto de su renuncia, en plena operación de los mercados financieros, además de que no estuvo en el video en el que el jefe del Ejecutivo designa a Arturo Herrera.
La misiva es precisa y fulminante y Carlos Urzúa coincidió con el diagnóstico que hizo el ex director del IMSS, Germán Martínez Cázares, cuando renunció y acusó de poderosos intereses en Hacienda, pero además reveló que hubo muchas “discrepancias en materia económica”, porque en este gobierno se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento.
Urzúa Macías denunció que algunos nombramientos en la Secretaría de Hacienda fueron impuestos por personajes influyentes del actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador con patente conflicto de interés y la verdad esto es grave porque puedes improvisar funcionarios en esta dependencia porque las decisiones en materia económica deben de tomarse con sustento para no comprometer le política económica del país.
Por otro lado, las consecuencias inmediatas que se registraron tras la renuncia de Carlos Urzúa, fueron la depreciación del peso y la caída del mercado bursátil y con la designación de Arturo Herrera como el nuevo responsable de las finanzas públicas, se estabilizaron, pero las consecuencias se observarán en el corto y mediano plazo y van a depender de la confianza que logre generar el nuevo secretario de Hacienda.
Finalmente la renuncia de Urzúa se suma a la de Josefa González Blanco en la Semarnat, a la de Germán Martínez, en la dirección del Instituto Mexicano del Seguro Social; Tonatiuh Guillén en el Instituto Nacional de Migración; Guillermo García Alcocer en la presidencia de la Comisión Reguladora de Energía; Patricia Bugarín en la subsecretaria de Seguridad y Protección Ciudadana; Simón Levy como subsecretario de Planeación y Política Turística de la Secretaría de Turismo; Omar García Harfuch en la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República y la Gaspar Franco Hernández integrante de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, fue el primer funcionario en renunció.
