Pátzcuaro, Mich., 14 de marzo de 2019.- El Gobernador del Estado Silvano Aureoles Conejo, hizo un llamado a la ciudadanía, a honrar la memoria de quien tanto dio a nuestro estado, Don Vasco de Quiroga, repitiendo el ejemplo que nos legó de siempre elegir el interés general sobre el interés personal.
«A más de cuatro siglos de su muerte, no hay mejor homenaje que recordar y nunca dejar de practicar como michoacanas y michoacanos, su legado de solidaridad y hospitalidad para quienes más lo necesitan», pronunció.
Al acudir como invitado especial a la ceremonia por el 454 aniversario luctuoso del primer obispo de Michoacán, Aureoles Conejo ratificó que nuestro estado no sería lo que hoy es, sin la gran fe de Don Vasco en nuestra tierra.
«Gracias a su fe y convicción de que un mundo mejor es posible, las sociedades compactas que conforman la región lacustre en el Estado, han logrado desarrollarse de manera solidaria y genuina», abundó.
A la comunidad católica del estado y del país, el mandatario estatal externó sus mejores deseos de éxito en el proceso de beatificación de Don Vasco, al tiempo que reiteró que su administración trabaja en conjunto con la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y la Universidad de Salamanca, para que se retome la Cátedra Don Vasco y la ruta turística del mismo nombre.
“Que su característica emblemática de gran humanista nos contagie a todos, para en tiempos complejos, poder reencontrarnos y reconocernos, y con ello, ayudar a la grandeza y al crecimiento de nuestra tierra y de nuestro estado”, finalizó.
Como orador oficial de este acto, el cardenal Alberto Suárez Inda, rememoró la vida y obra del primer obispo de Michoacán, “el español que se hizo indio”, y también hizo un llamado a que la obra de Vasco de Quiroga sea un estímulo y motivo de reconciliación y de mirar con confianza el futuro.
En tanto que el presidente municipal de Pátzcuaro, Víctor Manuel Báez Ceja, celebró que este Pueblo Mágico haya sido testigo material de la obra de Don Vasco, un hombre humanista y visionario que hizo realidad la utopía de Tomás Moro.
Las autoridades estatales, municipales y de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, como parte de este acto realizaron un recorrido y depositaron ofrenda floral en la plaza pública Vasco de Quiroga, en la Casa de Artes y Oficios, así como en la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, sitio en que se encuentran los restos del ilustre Tata Vasco.