Columna «Sendero Político», Por José Cruz Delgado (04-XII-18).- En entregas anteriores habíamos comentado que se esperaban desavenencias entre el gobierno de Michoacán y el prepotente Roberto Pantoja Arzola quien fue designado “súperdelegado” y al que llaman “El Virrey” al igual que a Alfredo Castillo Cervantes a quien los michoacanos recuerdan por su arrogancia y quien realmente tenía el poder mientras que a Salvador Jara Guerrero lo tenía como sirviente.
Este negro personaje con características de dictador desde el día en que el “Mesías” rindió protesta como presidente de México, quiso imponer condiciones y hasta le ordenó al gobernador Silvano Aureoles Conejo mediante un documento para que se presentara a una reunión en las instalaciones de la XXI Zona Militar donde sería presentado el Plan Nacional de Paz y Seguridad emulando al nefasto y tristemente célebre Alfredo Castillo Cervantes.
Pantoja Arzola quiere demostrar que tiene el poder que le fue conferido por el “Mesías”, quiere hacer sentir que él manda, pero está muy equivocado, porque quien tiene realmente el poder es el gobernador Silvano Aureoles Conejo, porque es el gobernador legitimado por los michoacanos y no fue producto del “dedazo” ni la imposición de un Poder Legislativo Federal arbitrario y déspota controlado por el partido de MORENA.
Luego de esta acción desatinada de Pantoja Arzola, el propio Aureoles Conejo anunció que presentará ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la controversia constitucional por la invasión de competencias y facultades que se establecen en la nueva ley, o más bien en la reforma a la Ley Orgánica de la Administración Federal, que crea las figuras de los conocidos ya como “súper delegados”, pues evidenció que hay una invasión competencial y el titular del Ejecutivo, el Gobierno del Estado, está obligado a defender el federalismo y el ámbito competencial porque de no hacerlo, estaría yo incurriendo en una omisión, ante una clara violación al pacto federal, una invasión de facultades y garantizar, en consecuencia, la supremacía constitucional.
El perredista tiene mucha razón al decir que no puede haber, dos autoridades paralelas, mucho menos puede haber una autoridad paralela cuando hay un gobernador, hay un Ejecutivo Estatal que tiene legalidad y legitimidad. En consecuencia, no puede haber una figura creada en una ley que está por debajo de la Constitución, y con esa figura invadir competencias.
Pantoja Arzola mostró su novatez, cometió un error garrafal al tratar de imponer sus condiciones a Silvano y generó un conflicto político y por lo tanto debe ser retirado de inmediato por Andrés Manuel López Obrador porque de no hacer estaría avalando el autoritarismo.
Efectivamente, la responsabilidad de Aureoles Conejo es velar por el pacto federal y por las facultades que le confiere el ser una autoridad electa en las urnas y por el otro lado, es la defensa de un derecho y es la defensa del derecho de Michoacán como parte de la Federación. Michoacán es una entidad que corresponde al pacto federal y como resultado de su estructura constitucional y de fundación de la unión.
Así que su decisión no es un tema que hoy pone a prueba a las instituciones ante una ruta y acciones legales y de actos, que ponen en riesgo la soberanía del estado, y ponen en riesgo la vida de la República Federada, porque somos una República Federada integrada por entidades federativas, que tienen autonomía, que tienen Congresos, que tienen Constitución y tiene Poderes constituidos.
Además el no volver a convocar a ninguna sesión de seguridad ni asistir, efectivamente no tiene Silvano por qué ir porque el Virrey no tiene ninguna facultad para hacer ese tipo de convocatorias, es una responsabilidad del mandatario estatal y no tiene por qué recibir órdenes de una persona impuesta por el gobierno federal.
En un documento enviado al gobierno estatal se señala: “Conocedor de su gran disposición para lograr el beneficio en pro de la paz y la seguridad de la región, proceso a solicitar de manera más atenta tenga a bien instruir al personal a su mando que atienden en la ciudad y región de Zacapu, para que asista, el día dos de diciembre del presente año a las ocho de la mañana en la sala de juntas de la Casa de la Cultura, ubicada en…”, y firma el doctor Celerino Felipe Cruz, que no sé si en su casa lo conozcan, señaló Silvano.
Y así se hizo lo mismo con los trece supuestos coordinadores, que si son coordinadores, no sé si están a la par del coordinador estatal o son distintos, pero el nombramiento que todos traen o que anexaron a los oficios enviados con los que están ostentándose, es un documento que dice nombramiento Carolina Rangel Gracida, región Morelia y entonces el nombramiento se lo da Alfonso Durazo, “ya no sé si son los mismos que el súperdelegado estatal o estos son otros, y estos dependen de otro, pero en materia de seguridad, los temas son muy delicados y nosotros no podemos estar convocando a personas que no sabemos quiénes son, dice con justa razón.
En ese sentido, Aureoles Conejo dijo que tomó la decisión de no participar en reuniones para revisar la estrategia de seguridad, con figuras que además no están acreditadas ni reconocidas legalmente para ejercer este tipo de funciones.
«Quienes realizan tareas para garantizar la seguridad pública tienen la responsabilidad institucional de acreditar exámenes de control de confianza, eso garantiza que la sensible responsabilidad de la seguridad esté en las manos correctas».
Cambiando el tema, las ocurrencias también llegan a los legisladores locales en Michoacám, pues Sandra Luz Valencia, de MORENA, presentó al Pleno del Congreso del Estado de Michoacán, la Iniciativa con Proyecto de Decreto, para que el año 2019 sea declarado, “El 2019, Centenario del Magnicidio del General Emiliano Zapata Salazar”, al hacerlo, la mencionada leyenda conmemorativa se imprimirá en toda la papelería del Congreso del Estado michoacano y éste deberá exhortar al poder Ejecutivo, Judicial, a los 112 Ayuntamientos y al Concejo Mayor de Cherán para que en su papelería oficial también agreguen dicha leyenda.
Bueno, para nadie es desconocido que Zapata no haya sido un prócer de la Revolución Mexicana, pero hay temas mucho más importantes pero todo indica que no le fluyen las ideas.