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Morelia, Mich., 27 de noviembre de 2018.- La decisión unilateral del Ejecutivo de Michoacán de regresar los servicios educativos al gobierno federal no sólo pone en vilo la estabilidad de miles de estudiantes y maestros en la entidad, también podría afectar a todos los michoacanos, ya que es sumamente irresponsable iniciar la relación con el próximo Presidente de la República rompiendo acuerdos, antes que buscar la construcción de consensos, advirtió Alfredo Ramírez Bedolla, presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso del Estado.
Ramírez Bedolla puntualizó que los diputados locales y federales de Morena reconocen que hay una crisis financiera en el sector educativo, razón por la que ya se encontraban creando condiciones en el Congreso de la Unión para que la nómina de los docentes y trabajadores administrativos fuera absorbida por el Gobierno Federal, resultado de un gran acuerdo entre las partes involucradas.
Sin embargo, añadió, al fijar incluso un plazo de 30 días para que se concrete el proceso de transferencia de los servicios educativos, el Gobernador Silvano Aureoles Conejo no da muestras de querer establecer una relación de coordinación con el Gobierno de la Republica, y se aleja de la ruta de conciliación de objetivos en favor de todos los michoacanos.
El coordinador del Grupo Parlamentario de Morena en la LXXIV Legislatura, afirmó que un estado como Michoacán, que recibe más del 90% de sus ingresos de la federación, no puede vivir un nuevo capítulo de confrontación con el Gobierno de la República a causa de una decisión arrebatada, o motivada por cálculos políticos; “las michoacanas y michoacanos ya sufrimos las consecuencias de una relación fallida entre un Presidente y un gobernador. No queremos más pleitos”, recalcó.
Agregó que el titular del Ejecutivo no está midiendo que una ruptura con la federación podría generar una crisis social y política para los michoacanos, “por ello los diputados de Morena reiteramos el llamado al Gobernador a no ‘bajar la cortina’ de la administración estatal, y definir una agenda conjunta de trabajo para fortalecer las gestiones ante la federación y ponderar el diálogo para construir un nuevo acuerdo político, porque Michoacán no puede quedar aislado del proyecto de nación”.
