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Morelia, Mich., 23 de agosto del 2018.- Los nicolaitas debemos reconocer la labor de quienes trabajaron incansablemente aportando su tiempo, capacidad y esfuerzo, para lograr que los investigadores de hoy cuenten con mejores condiciones de desarrollo, señaló Medardo Serna González, rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
En el inicio de las actividades conmemorativas por el 20° Aniversario del Centro Multidisciplinario de Estudios en Biotecnología (CMEB) de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, el rector felicitó a toda la comunidad por un aniversario más del CNEB, así como a dos de sus fundadores presentes: Salvador Galván Infante y Raúl Mejía, quienes dejaron un precedente importante en materia de investigación en la Casa de Hidalgo, “esa generación de nicolaitas será muy reconocida en la historia de la Institución por lograr la consolidación de la investigación científica en la Universidad Michoacana, cuya calidad la coloca como una de la mejores diez universidades del país”.
La investigación científica, añadió, es una de las funciones sustantivas de nuestra Universidad y fue a partir de los años noventas que se empezó a cultivar con mayor intensidad, con la suma de voluntades, talentos y capacidades se abrió la brecha para la creación de nuevos programas de posgrado, lo que nos ha llevado a ocupar actualmente el noveno lugar a nivel nacional por nuestro número de investigadores.
En el presente se construye lo que la Casa de Hidalgo será dentro de veinte años, el legado de la actual generación será mantener y elevar la calidad académica de los programas educativos de licenciatura y posgrado, para seguir formando capital humano que contribuya en el desarrollo del Estado y del país.
La Universidad Michoacana, definió el rector, se encuentra en una de sus etapas más críticas económicamente hablando, lo que nos invita a aprender de nuestra historia de colaboración para seguir construyendo, “necesitamos trabajar unidos a pesar de las diferencias que puedan existir, aún en la diversidad debe haber un propósito común y proyectos compartidos, debemos privilegiar las coincidencias y dejar las diferencias de lado para seguir avanzando en favor de nuestros estudiantes que son la razón de ser de esta Casa de Estudios”.
En la vida siempre van a existir retos, pero podemos salir adelante con trabajo y aprendiendo de nuestro pasado, porque cuando se impone el espíritu de la construcción y de la colaboración, los resultados siempre van a ser positivos, concluyó.
La encargada del CMEB, Alejandra Ochoa Zarzosa, señaló que el proyecto fue originalmente concebido como un laboratorio de Biotecnología y Biología Molecular, sin embargo, éste rebasó sus límites para convertirse en un Centro de Investigación consolidado en desarrollar líneas de investigación multidisciplinarias para resolver retos los actuales.
Recordó que han sido veinte años de muchas experiencias, con tristezas y frustraciones, pero también muchas alegrías y satisfacciones, “el camino no ha sido nada fácil por no contar con un presupuesto propio, pero hemos contado con la suerte de tener los apoyos gracias a los directores de la Facultad y de la propia Universidad”.
Para Jorge Arturo Arana Sandoval, director de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia es motivo de alegría conmemorar dos décadas de creación de un Centro que tiene que ver con dos de las funciones sustantivas de la Casa de Hidalgo: el desarrollo de la investigación científica de alto nivel y la formación de recursos humanos de calidad.
El CMEB, añadió, se crea en el mes de agosto de 1998 ante la imperante necesidad de los diversos desafíos del sector agropecuario en el Estado, para que pudieran atenderse desde un enfoque biotecnológico y con una perspectiva multidisciplinaria y brindar soluciones integrales.
Aquí se realizan investigaciones de alto nivel con un impacto importante en la salud pública y la reproducción animal, posicionándose actualmente como uno de los centros de investigación más innovadores del país cuyos académicos adscritos pertenecen al Sistema Nacional de Investigadores, hecho que pone de manifiesto la calidad de sus integrantes.
Finalmente consideró que la historia de esfuerzo, desarrollo y crecimiento del CMEB marcará una pauta dentro de la universidad y se quedará como un legado para las futuras generaciones.
Acompañaron la celebración realizada en el Auditorio del Centro Cultural Univesitario, Ireri Suazo Ortuño, titular de la Coordinación de la Investigación Científica y Horacio Cano Camacho, profesor investigador fundador del CMEB.
