Artículo de Fondo «Repercusiones», Por Samuel Maldonado (04-VI-18).- ¡Las noticias sobre la inseguridad que priva en todo el territorio nacional, ni nos alarma ni nos asusta¡ ¿Será que nos hemos acostumbrado a la ola de inseguridad? . Nos preocupa sí, la corrupción y la falta de tino de un gobernante que durante cinco años y medio (y seguramente en lo que resta de su tiempo lo confirmará) no ha sabido, ni sabe, ni le preocupa no saber, lo que en teoría debe ser un Presidente de la República.
Afortunadamente dejará su posición a ya saben quien, no porque quiera sino porque la mayoría de los ciudadanos estamos hartos de tanta ignominia y desinterés que ha tenido para con su Patria el tal Peña. No sabe (o sabe disimular muy bien) la problemática que heredara a su sucesor: un país, que es considerado como el más violento de toda la América”
Analizar las posibles alternativas que pudieran llevarse a cabo a efecto de tranquilizar a la sociedad, pacificar el país y desarrollarlo adecuadamente, como lo vislumbramos los que de corazón queremos un mejor país, no será nada fácil, pues a lo largo de 18 años de haberse iniciado una guerra estúpida, presidentes han pasado sin gloria alguna, que dan pena y no se diga del actual. En cinco años y medio, el inquilino de Los Pinos degradó bruscamente la figura presidencial y tal vez ni siquiera se da cuenta de ello.
Por ese fracaso gubernamental de los cinco pasados años, descifrar su programa de gobierno y ejecutarlo le fue imposible; bueno, si dio en el blanco cuando adquirió el súper jet de que le permitió darle la vuelta al mundo.
Esa inutilidad del gobierno nacional es la que nos impulsa a descargar nuestra molestia, coraje y decepción en contra de segundas autoridades, nacionales como estatales, que no cantan mal las rancheras principalmente cuando se toman unos tragos de mezcal para afinar la voz.
Esas copas de más de cuarenta grados de alcohol, nos hacen recordar administraciones federales, tanto la del impostor Felipe (“Cretino, empobreciste a la gente”, con frecuencia le gritaban) que él mismo se ridiculizara, disfrazándose de soldado, vistiéndose con una casaca de soldado y agraviando con esa vestidura al glorioso Ejercito Nacional del que fuera general en jefe).
A partir de ese borra…scoso gobierno, se inicio una guerra estúpida que muchos creemos todavía, fue el camino para reconocerse por si mismo como autoridad presidencial. La guerra de él, contra las drogas, luego fue continuada por sus sucesores, misma que ha causado innumerables asesinatos a lo largo y ancho de nuestro territorio.
Por todo lo anterior, la vida en toda la República se ha agravado: los ricos son mas ricos y los que no tenemos para pagar escoltas, sencillamente nos aguantamos el coraje, buscando desde luego algunas alternativas para preservar la tranquilidad de nuestras familias.
Los muertos siguen cayendo y México sigue siendo uno de los países más peligrosos y violentos en el mundo, todo por la estulticia o estupidez de los últimos gobernantes, pero principalmente de quien terminará su mandato en unos cuantos meses más. Dejará prácticamente al país en banca rota, debido a una enorme deuda pública y desafortunadamente, con miles de asesinatos que pintan las calles de rojo por la sangre derramada a diario.
No obstante la crítica situación, Quique se presenta y presume constantemente sus actos valientes en defensa de la Patria, pero los múltiples asesinatos ya son incontables, de tal manera que las estadísticas señalan a México como el país más violento de América, como el Estado donde se cometen más arbitrariedades contra la población.